La Generalitat y el empresariado valenciano se han encontrado de forma inesperada con otro motivo fundado para alimentar el relato del agravio territorial que no cesa. En una decisión tomada el pasado diciembre pero que trascendió ayer, el Gobierno de Rajoy elevó a Europa una propuesta de redes de transporte prioritarias dentro de la UE que da prioridad al corredor atlántico frente al mediterráneo y deja a València sin dos de sus tres corredores de transporte fundamentales para el tráfico de mercancías.

El Consejo de Ministros europeo aprobará el próximo viernes el plan financiero plurianual para el periodo 2021-2017, en el que se incluirá el mapa de redes prioritarias que contarán con una financiación de 30.600 millones. Y en lo que respecta a la C. Valenciana, solo se incluye el corredor mediterráneo.

La Generalitat y el tejido económico valenciana contaban, tal como estaba previsto desde los tiempos de Ana Pastor al frente de Fomento, con que estuvieran incluidos también un eje Atlántico- Mediterráneo con el trazado Valencia-Madrid-Lisboa. Sin embargo, el trazado València-Madrid deja de ser prioritario y la propuesta pasa a ser Barcelona-Madrid-Lisboa.

Barcelona, la gran beneficiada

Por otro lado, el tramo Sagunt-Zaragoza desaparece del mapa de redes «core», que era lo previsto en la conexión Cantábrico-Mediterráneo, y entra el Zaragoza-Pamplona, de modo que el trazado de referencia será el Barcelona-Zaragoza-Pamplona-Bilbao. En ambos casos, Barcelona sale beneficiada del nuevo dibujo de redes prioritarias para el transporte de pasajeros y mercancías. El nuevo mapa da al puerto de Barcelona una posición central para el tráfico de mercancías desde el Mediterráneo hacia el Cantábrico y el Atlántico. Una posición que gana frente a València, que queda aislada. Sus ejes de transporte, a excepción del corredor mediterráneo, quedan relegados a la segunda división de las redes europeas.

La Autoridad Portuaria cargó ayer contra el anterior Gobierno del PP, al que responsabiliza de que València pierda protagonismo. Según desveló ayer el presidente de la APV, Aurelio Martínez, en diciembre Fomento elevó su nueva propuesta de ampliación de los corredores. Martínez culpa al exministro de Fomento, Íñigo de la Serna, y al propio Rajoy, de dejar fuera deliberadamente que el trazado Sagunt-Zaragoza y el València-Madrid. Desde el PP aseguraban ayer que la propuesta elevada a Bruselas sí incluía el trayecto entre el puerto de Sagunt y Zaragoza, pero que la Comisión Europea decidió no incluirlo.

El pasado 6 de junio, sin embargo, el Ministerio de Fomento informaba en un comunicado de que la Comisión Europea había aceptado la propuesta española de ampliación de los corredores atlántico y mediterráneo. El departamento celebraba que Bruselas había aceptado la incorporación de seis nuevos trazados y puertos a la red básica transeuropea, pero no señalaba nada respecto a la petición rechazada de València.

Martínez, tras la reunión del consejo de administración de la APV, tiró de ironía para criticar un trazado que beneficia básicamente a comunidades del norte y noroeste de España. Y no dudó en apuntar al exministro de Fomento Íñigo de la Serna (vasco afincado en Santander) y al expresidente Rajoy (gallego) como los que «promueven» un mapa en el que hay una descompensación de trazados y deja al puerto «desvinculado» de las grandes redes de transporte.

En el nuevo mapa, pendiente de ratificar en Bruselas, el corredor València-Madrid «no está» como una de las redes que «concentran los principales flujos de mercancías y de personas», abundó Martínez. Sin embargo, sí están Coruña-Vigo-Orense-León, Gijón-León-Venta de Baños, Huelva-Sevilla, el corredor del río Guadalquivir, Zaragoza-Pamplona-Logroño, la vía fluvial del río Oporto hasta la frontera, o Sines (Portugal)-Madrid. Ganan Navarra, Asturias, Galicia o Cantabria.

El hecho de que el València-Madrid o el Sagunt-Zaragoza deje de tener esta consideración no significa que por esos corredores no vayan a poder circular mercancías. Pero sí habrá consecuencias inmediatas desde el punto de vista financiero. Sobre todo en lo que respecta al tramo Sagunt-Zaragoza, todavía por desarrollar. El 75% de los 30.600 millones del plan plurianual 2021-2027 se lo repartirán los corredores que han sido 'pintados' en este nuevo mapa. Sin embargo, este tramo Sagunt-Zaragoza, estratégico para la C. Valenciana por que le da una salida al Cantábrico, solo podrá optar a pescar alguna subvención dentro de un paquete del 10% de todo ese dinero.

En estos momentos, este tramo, que necesita 350 millones de inversión, está siendo mejorado a costa del presupuesto del puerto de València, aunque el movimiento de mercancías es muy precario. El grueso deberá costearse con los Presupuestos Generales del Estado. Su finalización se prevé para 2021. El tramo Zaragoza-Pamplona, por contra, sí podrá aspirar a las ayudas europeas.

Al margen de las inversiones para infraestructuras ferroviarias, el presidente de la Autoridad Portuaria alertaba ayer de otros efectos colaterales negativos. «Es un problema también de visualización de la importancia de los tráficos ante cualquier logístico exterior. Y València se ve marginada incluso en corredores que ya funcionan, y bien, como el Madrid-València», explicaba ayer. «Si soy un chino o un indio, y busco un emplazamiento en España, con este mapa veo que desde València solo puede conectarse con Barcelona a través del corredor mediterráneo», citó como ejemplo.

«Si soy un inversor buscaré un emplazamiento con las mejores conectividades. Consultaré las grandes redes transeuropeas y ahí no estamos dibujados. Esto no favorece al puerto, y tengo dudas sobre en qué porcentaje le va a perjudicar», añadió.