Varias son las ocasiones en las que el poseedor de la cartera de Fomento ha visitado la C. Valenciana en el último año, pero esta vez «hay un cambio en la atmósfera extraordinariamente positivo». Con estas palabras el presidente Ximo Puig define las relaciones que la Generalitat mantiene con el actual Ministerio de Fomento socialista, capitaneado por el valenciano José Luis Ábalos.

Ayer, Puig le recibió en el Palau y mantuvo con él una reunión «fructífera». Del encuentro, el Consell gana la creación de tres comisiones y varios compromisos, el más importante de ellos, el de impulsar el corredor mediterráneo y mantener los plazos para su puesta en marcha.

Además, Ábalos anunció que la C. Valenciana con Ximo Puig al frente «liderará el proyecto» del corredor mediterráneo, aunque, por el momento, evitó dar detalles. «Liderar exige tener un líder, y ya lo tenemos», es lo único que dijo al respecto, aunque todo apunta a que nombrará a un nuevo coordinador de la infraestructura.

Asimismo, aprovechó para «lanzar un mensaje de tranquilidad» en cuanto al cumplimiento de las obras previstas. «Todo lo programado que no sea una insensatez es voluntad hacerlo en los plazos previstos», aseguró, al tiempo que consideró que el corredor «es un proyecto, no solo del Mediterráneo, sino fundamental para toda España».

En cuanto a la exclusión de València de las redes ferroviarias del Atlántico y el Cantábrico, Ábalos reconoció que fue «shock» y que , por esto, el próximo martes pedirá explicaciones a Violeta Bulc, la comisaria europea de Transportes, con quien tiene prevista una reunión. Sobre este tema, también afirmó que no se puede estar conectados al resto de Europa sin alianzas con Francia y Portugal, por lo que han previsto una cumbre cuatripartita.

Precisamente ayer, todos los partidos políticos de las Corts firmaron una declaración institucional a favor de la inclusión de los corredores atlántico y mediterráneo-cantábrico en las redes europeas de transporte. En concreto, consideran «especialmente grave» la ausencia del tramo València-Zaragoza, que une varios puertos y plataformas logísticas.

La reunión entre ambos políticos también sirvió para acordar una comisión sobre la liberalización de la AP-7, que trabajará sobre el documento técnico que elaboró el departamento de Maria José Salvador para el anterior Ejecutivo. Además, otra comisión estudiará el plan de Cercanías, y otra mixta y permanente, para evaluará la actuación de Fomento en tierras valencianas.

Ábalos también se comprometió a firmar el convenio en materia de vivienda pendiente y a «ver en qué manera podemos influir» en los recursos de anticonstitucionalidad que el anterior gobierno del PP puso contra la leyes valencianas de la Vivienda y del Taxi.

Sobre las reivindicaciones del Consell por la infrafinanciación, el ministro aseguró que le parecen «justas» y que por eso no suponen «un agravio» respecto a otras autonomías, pero advirtió que no dará a la C. Valenciana «ningún trato a favor, más allá de la sensibilidad, porque estoy comprometido también con el resto de España».

Ábalos destacó el papel que ha tenido Puig en el debate sobre el modelo de financiación y, aunque afirmó que el nuevo sistema no estará listo en esta legislatura, avanzó que la C. Valenciana podrá resolver alguna cuestión en la comisión bilateral prevista con Pedro Sánchez.

Ximo Puig, por su parte, destacó que estos compromisos son «símbolos de un nuevo tiempo», en el que «por lo menos tenemos a alquilen que nos escucha».

Asimismo, respecto a las actuaciones anteriores, el presidente valenciano lamentó que «el cortoplacismo ha sido un gran error» ya que «las infraestructuras no entienden de legislaturas».