Agentes de la Policía Nacional han detenido a 36 personas en una operación denominada "Black Point" para erradicar hasta once "puntos negros" de venta de drogas en la provincia de Valencia, y se ha incautado, aparte de cocaína, heroína, éxtasis, hachís y marihuana, de casi 95.000 euros en metálico.

El dispositivo se ha ejecutado en tres intervenciones en las que se han realizado veintiún registros, trece de ellos en València, donde se han incautado más de 1.800 gramos de marihuana, cocaína, hachís, heroína, éxtasis y cristal.

En uno de los domicilios se encontró también una plantación con 125 esquejes de marihuana y con el enganche fraudulento de electricidad, según la Policía, que detalla que las investigaciones comenzaron a mediados del pasado mes de abril.

Se averiguó entonces que en domicilios de la zona de la Malvarrosa y la Ciudad Fallera en València y también en Torrent se podrían estar vendiendo sustancias estupefacientes, por lo que se establecieron diversos dispositivos de vigilancia para su detección.

Los investigadores observaron que en uno de los puntos, durante todo el día y hasta altas horas de la madrugada, desde varios pisos había vendedores que actuando como comerciantes en la calle salían a buscar a los compradores que pasaban por la calle y los acompañaban hasta su casa, todo ello en una organización "perfectamente estructurada" y donde cada uno tenía una función determinada.

Los clásicos "aguadores" que se situaban en las entradas de las calles para detectar la presencia policial y dos clanes familiares que desde los pisos no solo menudeaban sino que abastecían al resto de integrantes de la organización.

Se localizó otro punto de venta en Torrent, en un local que realizaba su actividad de venta de sustancias "como si de un establecimiento abierto al público se tratase", comenzando la actividad a partir de las doce del mediodía, así como tres domicilios en la Ciudad Fallera de València donde supuestamente estarían vendiendo sustancias estupefacientes por personas pertenecientes a otro clan familiar.

En los registros en la zona del Marítim algunas de las personas que posteriormente fueron arrestadas arrojaron la droga por las ventanas de la parte trasera de los domicilios o intentaron escapar.

Los registros se realizaron de manera coordinada y simultánea, por las características de las viviendas al ser especialmente complicadas, y se detuvo "in fraganti" a la mayoría de los investigados en el interior de las casas, consiguiendo alguno de ellas deshacerse de las sustancias.

En el Marítim de València se han desmantelado nueve puntos de venta de cocaína y heroína y se ha detenido a diecinueve personas, mientras que en los nueve registros se han incautado 126 gramos de heroína y 64 de cocaína, así como 5.467 euros y cuatro básculas.

En la Ciudad Fallera se ha detenido a ocho personas y se han practicado tres registros, donde se han incautado 333 gramos de marihuana y 25,30 de hachís, 1.151 euros, siete móviles y tres básculas.

Además se ha localizado en uno de los domicilios una plantación con 125 plantas de marihuana, en la que tenían un enganche fraudulento de electricidad, por lo que a dos de los arrestados también se les imputa un delito de defraudación de fluido eléctrico.

En el registro de Torrent se ha desmantelado un punto de venta y se ha detenido a dos personas que se hacían cargo de las ventas, así como a los dos responsables de la organización y posteriormente a las otras siete personas integrantes que suministraban al local o guardaban las sustancias.

Allí fue localizada una caja fuerte en un pequeño cuarto a modo de almacén con 94 gramos de al parecer cocaína.

Como consecuencia de las investigaciones se practicaron ocho registros más en Torrent, Chiva, Aldaia, Vilamarxant y València, en los que se incautaron 88.362 euros, 231 gramos de cocaína, mas de 1.500 de hachís, mas de 61 de éxtasis, 892 de marihuana y 6 gramos de cristal, básculas y otros efectos de manipulación de la droga.

Según la Policía, cuatro de los detenidos tenían cada uno de ellos dos búsquedas e ingreso en prisión, e incluso uno llevaba cuatro años y nueve meses sin salir esperando los cinco años para que prescribiera la orden.

En los dispositivos han participado agentes de la brigada provincial de la Policía Judicial, de las Comisaría del Marítim, Tránsits, U.I.P., GOES Guías Caninos y Policía Local de Valencia.