Soraya Sáenz de Santamaría no ha ganado en las primarias del PP ni en València, ni en Castelló, ni en Elx ni en Alicante. En las tres primeras se vio arrollada por Pablo Casado y en la última consiguió empatar, al menos, con Dolores de Cospedal (la favorita, según los mentideros populares, del alcalde, Luis Barcala). Y aún así logró ser la más votada el pasado jueves entre los inscritos en la Comunitat Valenciana. No por mucho (481 papeletas más que el exvicesecretario de Comunicación), pero lo suficiente para que el PPCV no se desmarque de la tónica en toda España.

¿Qué pasó? Que Sáenz de Santamaría rascó mucho más apoyo que el resto en las ciudades medias y pequeñas. Pasó en Torrent (el territorio de la exconsellera María José Català), Gandia, Benidorm, Orihuela o Torrevieja. En estas últimas urbes alicantinas obtuvo victorias aplastantes que habrá que atribuir al líder provincial, José Císcar. El exvicepresidente del Consell sale bien parado del envite. Mucho mejor que el presidente de la Diputación de Alicante, que se alineó públicamente con De Cospedal.

¿Por qué sucedió? Los equipos de los candidatos perdedores resumen su opinión en tres palabras: funcionó el aparato. Esto es, añaden, operó el temor en los dirigentes locales a quedar al margen de futuras listas electorales.

No obstante, habrá que esperar al día 21, fecha final del congreso nacional del PP, porque la victoria de Sáenz de Santamaría ha sido demasiado estrecha por entonar el alirón. La mejor prueba es que Casado (y sus apoyos valencianos) no quieren oír hablar, al menos de momento, de acuerdos con la ganadora el jueves.

Confían, al contrario, en recabar el respaldo de los compromisarios afines a De Cospedal. Algunos de los valencianos afirman ya en privado que los tendrá sin ningún problema. El joven político en la estela de Aznar representa para ellos un modelo de partido mucho más próximo al de la exministra que el que ofrece Sáenz de Santamaría, su enemiga íntima.

La presión, por tanto, recae ya sobre los 349 delegados valencianos al congreso. Una cuota importante: el 13,4 % del total.