El cierre repentino de las clínicas de la empresa de odontología iDental ha dejado muchos más quebraderos de cabeza que los meramente económicos para aquellos pacientes que han visto sus tratamientos dentales a medio terminar y sin acabar de pagar.

De hecho, la Generalitat Valenciana ha anunciado que investiga un posible contagio de hepatitis C y de otros virus tras detectar irregularidades en la esterilización del instrumental y material caducado.

Además, ha propuesto abrir un expediente sancionador a un establecimiento de la empresa en la ciudad de València. Concretamente al ubicado en la calle Mariano Cuber, del barrio de Canyamelar.

Pese a que la Conselleria de Sanidad explicó a Levante-EMV que a Alta Inspección «no le consta ninguna denuncia y que se han seguido todos los protocolos oportunos así como las inspecciones correspondientes», lo cierto es que los clientes de estas clínicas

Es el caso de Francisco, un joven vecino de València de 34 años que comenzó su tratamiento de ortodoncia en la clínica iDental y al que le han dejado el proceso a mitad. Tanto es así, que se enteró del cierre de la empresa cuando acudió a su cita programada el mes pasado «y cuando llegué, estaba todo desmantelado».

«El próximo 13 de julio ya tengo cita para hacerme los análisis», comentó a este periódico. La recomendación de llevar a cabo estas pruebas viene de la plataforma de Afectados por iDental València, que lleva en funcionamiento varios años y que realiza sesiones informativas periódicamente junto con abogados que asesoran a los damnificados.

La alarma saltó con el caso de R., una valenciana viuda de 62 años que ha resultado estar infectada por hepatitis B. «Por suerte la enfermedad se ha estabilizado pero lo estoy pasando muy mal, tanto que estoy en tratamiento con antidepresivos», contó a este diario. R. (quien desea mantener el anonimato) decidió someterse a las pruebas de detección de VIH y hepatitis el año pasado, tras informarse de que exempleados de las clínicas aseguraban que no se guardaba el celo necesario en la higiene del material.

Esta valenciana, que ha puesto el caso en manos de abogados, afirma que no ha mantenido «ningún comportamiento de riesgo» para el contagio de la hepatitis B que le ha sido diagnosticada.

Sol Sánchez es quien gestiona la plataforma de Afectados por iDental València. También se sometió a las pruebas de virus, dando negativo en todas ellas. «Sabía que había gente que sufría estas enfermedades y vi, durante mi asistencia a iDental, comportamientos por parte del personal que no eran normales. Aunque eso sí, tuve otras afecciones que ya remitieron», señaló Sánchez.

Otra de las pacientes de esta cadena de clínicas dentales es Mª Ángeles, de 39 años y también vecina de la ciudad de València. «En un par de semanas iré a hacerme los test de VIH y hepatitis». Tomó esta decisión tras acudir a una de las reuniones informativas de la plataforma que gestiona Sánchez en la que se recomendó a los asistentes que se las hicieran. No en vano, como ya publicó este diario, la Asociación Defensor del Paciente de Murcia recomendó hace unos días a quienes pasaron por iDental que se sometiesen al test de VIH.