Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Infraestructuras

La depuradora de Cheste-Chiva evitará que se contamine l'Albufera

Durante años, la CHJ ha multado al consistorio por los vertidos procedentes de un polígono local

La depuradora de Cheste-Chiva evitará que se contamine l'Albufera

La futura depuradora ubicada en Cheste, que abastecerá a esta población y a Chiva, permitirá reducir la contaminación de l'Albufera al acabar con los vertidos procedentes de algunas empresas del polígono Castilla.

Actualmente, los vertidos de la depuradora de esta zona industrial ubicada en Cheste desembocan en la Rambla de Chiva y en su continuación, el Barranco del Poyo, hasta llegar al parque natural.

Según comentó ayer el alcalde de Cheste, José Morell (PSPV), la construcción de la depuradora -que costará 29,8 millones- «beneficiará al medio ambiente, ya que las aguas vertidas a cauce desde la población llegan a un área tan sensible como es l'Albufera».

Ya en el pleno de abril, el actual equipo de gobierno retomó y aprobó el proyecto de la macrodepuradora porque como declaró Morell entonces «existe una problemática muy clara: hay vertidos de seis depuradoras de Cheste y Chiva que no están adecuadamente tratados y que vierten al sistema fluvial que va a parar a la Albufera».

Tal como explicó Morell, España tenía abierto un expediente sancionador por esta cuestión y la solución que se consideró más adecuada es «la construcción de esta EDAR para los dos municipios».

En los últimos años, el consistorio tuvo que hacer frente a multas de la Confederación Hidrográfica del Júcar de 100.000 euros anuales, al haber subrogado la responsabilidad del ejecutivo anterior de Cheste, lo que ha supuesto un grave impacto para las arcas locales.

Desde 2015, ya con Morell en la alcaldía, este equipo de gobierno ha puesto en marcha diversas iniciativas para resolver este problema medioambiental, entre las que se encuentran la revisión de la ordenanza anterior y redacción de la nueva, la contratación de una técnico medioambiental, la negociación con la CHJ para instaurar un programa a 4 años de reducción de vertidos y la implementación de un Plan de Autocontrol y un Plan de Control de Vertidos en Origen.

Además ha habido varias reuniones con la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar), que va a licitar las obras de la construcción de la EDAR y los colectores generales, como publicó ayer este diario, porque se trata de una obra cofinanciada con fondos Feder que debe estar terminada en 2020.

En definitiva, la calidad de las aguas vertidas al suelo y subsuelo de esta zona van a mejorar significativamente.

Compartir el artículo

stats