El presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, ha acudido esta mañana al juzgado de Dénia para prestar declaración como investigado en el juicio por la denuncia que presentó una empleada municipal del ayuntamiento por supuestos delitos de malversación y coacción.
El juez decretó hasta en dos ocasiones el archivo de la causa al no apreciar indicios de delito, aunque la Audiencia Provincial de Alicante decretó a finales de junio la reapertura del caso y citó como investigado al propio Sánchez.
A su llegada al juzgado, el presidente de la Diputación de Alicante se ha mostrado tranquilo. Ha acudido acompañado de su abogado, el director del gabinete de Presidencia de la diputación, Juan Bautista Roselló, y una trabajadora del ayuntamiento de Calp.
A su salida, el también alcalde de Calp se ha mostrado tranquilo y ha indicado que confía "plenamente en la justicia", una frase que ha repetido en varias ocasiones al ser preguntado por los periodistas.
Respecto al futuro de su situación y al tiempo que llevará a la juez del caso continuar con la investigación o cerrarla, el mandatario de Calp ha indicado que "la justicia tiene sus tiempos y hay que respetarlos".
