La Federació Escola Valenciana y de Acció Cultural del País Valencià mantuvieron una reunión con el ánimo de valorar los tres años de gestión del Botànic desde el punto de vista de la lengua y la cultura. Reconocen el cambio político «que ha puesto fin a la política de persecució de la lengua», y señalan la utilización del valenciano por parte de los cargos públicos o la puesta en marcha de À Punt como «pasos adelante. Ahora bien, exigen la reciprocidad con TV3, el requisito lingüístico del valenciano para acceder a la Administración y la entrada del Gobierno en el Instituto Ramón Llull.