El presidente del Senado y del PP en la comunidad de Madrid, Pío García Escudero, ha defendido en València "la plena vigencia de los principios constitucionales, aunque sea chocante decir que es actual algo que sucedió hace cuarenta años", aseguró en referencia al cuarenta aniversario de la Constitución Española. García Escudero ha ofrecido la conferencia "Sesión plenaria. El pluralismo político y territorial: su reflejo en el Senado" en la inauguración del curso "Principios y valores constitucionales: su vigencia en el XL aniversario de la Constitución", de los cursos de verano de la Universidad Católica de Valencia.García Escudero fue presentado por el expresidente del Consell Jurídico Consultiu, Vicente Garrido. Al acto también han asistido los senadores Alberto Fabra, Joan Lerma y Pedro Agramunt, además de la presidenta del PPCV, Isabel Bonig. Francisco Camps también estuvo en el mismo edificio de la Universidad Católica en Guillem de Castro, pero optó por no hacer acto de presencia en la charla de Pío García Escudero.

El político popular aprovechó su conferencia para "intentar desmontar equívocos sobre el espíritu de la Transición, como el mito de que fue un pacto de silencio sobre nuestra historia reciente: la II República, la Guerra Civil y el franquismo". "Al contrario -defendió- no pactamos para cerrar nada en falso ni sobre el olvido, sino sobre el aprendizaje de nuestra experiencia histórica. Fue un pacto de reconciliación", defendió el presidente del Senado. Por ello, justificó, "la clave de la vigencia de la Constitución está en su propio origen. Los españoles de hoy somos herederos de ese gran pacto" aunque, admitió, "sólo uno de cada cuatro españoles de hoy pudo votarla. ¿Pero es por este detalle dudosa su legimitidad?, se preguntó.

La postura defendida por el dirigente popular "ante la actual situación política" es que "toca defender la Constitución con firmeza de sus enemigos, no reformarla" porque el texto "ofrece seguridad". "Dentro de ella sabemos a qué atenernos y fuera, solo hay inestabilidad e incertidumbre", abogó Pio García Escudero.

Para el presidente del Senado sólo se podría hablar de reformar la Constitución, "para mejorarla y no desvirtuarla, para fortalecerla y nunca para debilitarla". "Si queremos abrir un proceso de reforma constitucional, hagámoslo con una finalidad determinada, reformemos para algo concreto", abogó porque "no es sensato empezar la casa por el tejado, proponer una reforma porque sí, sino empezar por el contenido y luego plantearla". Una reforma que, en cualquier caso, debería contar "con el mismo grado de consenso logrado en 1978, que cosechó un respaldo del 90% en el Congreso y Senado y un 88,5% de apoyo de la pblación" en el referéndum que se celebró. Eso sí, advirtió que "se engañan los que esgrimen la reforma de la Constitución cómo solución mágica de la recuperación de la confianza ciudadana en las instituciones o para el alivio de las tensiones territoriales".

Incluso incidió en que la Constitución no es "un tratado confederal entre territorios soberanos con derecho a la autodeterminación", y por tanto ningún territorio puede invocar "ningún imaginario derecho a decidir", especialmente en los términos constitucionales referidos a la unidad de la nación y la integridad del Estado. Por ello, se preguntó en voz alta "qué sentido tendría hablar de reformar la Constitución con quienes han intentado acabar con ella" al tiempo que sentenciaba que "el intento de declaración golpista de la independencia de Cataluña se solventó con éxito y contundencia gracias a la solidez de nuestro Estado de derecho y la eficacia de los poderes públicos". Según García Escudero, "la grave deslealtad de los independentistas catalanes sometió al sistema constitucional a un intenso test de estrés, que ha servido para demostrar su gran fortaleza".

Preguntado a la salida de la conferencia sobre la posibilidad de presentar una candidatura única para dirigir el PP, defendió que «la unidad es la fortaleza del Partido Popular y los candidatos lo saben». Al ser preguntado sobre el proceso de primarias que afrontan los populares esta semana y cómo le gustaría que se desarrollaran, el dirigente popular ha replicado que «ya hay unas reglas marcadas de cómo tienen que ser». Aunque interrogado sobre si debería presentarse una lista unitaria entre Soraya Sáenz de Santamaría y Pablo Casado, el presidente del Senado ha asegurado que es «partidario de que se mantenga la unidad del partido popular que es la gran fortaleza del PP y los candidatos lo saben».

Interrogado también sobre el vídeo que identifica a Sáenz de Santamaría con líderes históricos del PP como Javier Arenas, Cristóbal Montoro o Celia Villalobos, García Escudero ha asegurado que no le gustan ese tipo de recursos. En el turno de preguntas tras su conferencia también se ha declarado «neutral» en el proceso de primarias, tal como ha manifestado también la presidenta del PPCV, Isabel Bonig.