Decenas de personas se han congregado hoy en la puerta de la Conselleria de Educación por el elevado número de aspirantes que no han superado las últimas oposiciones docentes y reclamar la revisión de las pruebas, así como "un nuevo sistema de ingreso" que sea "más justo y objetivo".

Las pruebas de la fase de oposición del cuerpo de maestros han sido superadas por un total de 5.448 personas de entre los casi 17.000 docentes que había inscritos en un principio, lo que supone un 35 % de aprobados, una cifra que ha provocado reacciones entre algunas de las personas suspendidas.

En la concentración, apoyada por el Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament (Stepv), su portavoz, Marc Candela, ha señalado que ha participado en una reunión con el grupo de trabajo para la oferta de educación secundaria en las oposiciones de los años 2019 y 2020 en la que ha "aprovechado para hablar de las oposiciones del actual semestre" y pedir "explicaciones" a la falta de atención a las protestas de las personas opositoras.

En esa reunión, según ha asegurado Candela, el director general de Personal Docente, Joaquín Carrión, ha señalado que no ha atendido las protestas para "no interferir" en el trabajo de los tribunales y "se ha comprometido a introducir mejoras y cambios" en el futuro.

"De cara a próximas convocatorias de oposición", ha indicado el representante sindical, los miembros del tribunal "están dispuestos a estudiar propuestas de mejora", pero ha sostenido que "a estas alturas", y en relación a las oposiciones de este año, "el tema está cerrado".

Por su parte, la abogada Rocío Fuentes Gala, encargada de tramitar las demandas judiciales de algunas de las personas que no superaron las pruebas de oposición, ha considerado que "como en todas las oposiciones, puede haber suspendidos", pero "lo que no se contempla" es que haya gente "que haya sido suspendida por alguna indicación" y no en función de criterios objetivos.

"Al final es llevar a cabo la ley", ha subrayado Fuentes Gala, y hacerlo con "una oposición que contemple méritos, capacidad e igualdad, que es lo que supuestamente ha faltado".

Mar, examinada en Castellón en la especialidad de Educación Infantil, ha señalado que "hay plazas que no se han cubierto" y que no sabe "qué va a pasar" con ellas, pero que "lo lógico es que cojan a más personas"; y Sheila, de la especialidad de Inglés, ha criticado que "se han vulnerado descaradamente" los principios de la prueba.