La vocal del Consell de Transparència, la profesora de la Universidad de Alicante, Isabel Lifante, ha presentado su renuncia a seguir formando parte de este organismo. En un escrito registrado en las Corts, Lifante fundamenta su marcha en la "imposibilidad" de seguir compatibilizando la dedicación que requiere el cargo con su trabajo universitario. "Tras dos años y medio de funcionamiento del Consejo de Transparencia, los medios, sobre todo, personales con los que cuenta son a todas luces insuficientes".
La marcha de Lifante deja vacante un puesto y evidencia el malestar que desde hace tiempo han dejado constancia los miembros de este órgano que aseguran estar saturados de trabajo y afean al Consell, y en concreto, al departamento que dirige Manuel Alcaraz, de no proporcionarle los medios adecuados.
Con la renuncia, el grupo parlamentario Ciudadanos (Cs) en Les Corts Valencianes ha denunciado que el abandono del conseller Manuel Alcaraz con el Consell de Transparencia ya ha provocado las primeras dimisiones en esta entidad. Según ha explicado el diputado Toni Subiela, Lifante se ha marchado por frustrantes condiciones en las que ejerce su labor, una situación que el diputado ha tachado de "estafa hacia la ciudadanía y hacia los propios trabajadores del Consell de Transparencia, a quienes se exige mucha más dedicación y responsabilidad de la que pueden asumir".
"Este caso es solo una prueba más de que al Botánic solo le interesa vender el discurso de la transparencia en el programa electoral", ha añadido Subiela, para quien "con este gobierno valenciano no ha cambiado absolutamente nada, lo que exigían en la oposición, está claro que no han querido aplicárselo una vez ya en el poder".
El diputado, que ha lamentado el "cinismo" con el que el ejecutivo de Puig está tratando al Consell de Transparencia, ha asegurado que "la situación actual no es novedosa". "Desde el principio de la legislatura, los miembros del ente llevan denunciado el estrangulamiento intencionado que sufren a manos de la nueva Conselleria de Transparencia, incapaces de atender las exigencias de los valencianos, y trabajando desde la más absoluta impotencia", ha concluido.
