Los taxistas de varias ciudades de Andalucía, Baleares, Aragón, País Vasco, Navarra, La Rioja y Cantabria, entre otros territorios, se sumaron ayer a la huelga que mantienen sus colegas de Barcelona y Madrid -a la que el pasado sábado se sumaron los de València, Alicante y Castelló- en protesta por la concesión de licencias de vehículos de transporte con conductor (VTC), con las que operan empresas como Uber y Cabify.
Estas ciudades se han sumado a la huelga a pesar de que el Ministerio de Fomento convocó a las principales asociaciones y federaciones del taxi y del sector VTC a sendas reuniones hoy y mañana para tratar sobre los problemas que les afectan. Desde el Ministerio de Fomento se ha realizado un llamamiento «a la calma» y solicitó a las asociaciones del sector la «vuelta a la normalidad, como paso previo y necesario para avanzar hacia una solución conjunta con todas las administraciones afectadas».
Fomento ha citado hoy a las principales asociaciones del sector, entre ellas, a Fedetaxi, el martes el encuentro será con las asociaciones de las VTC, y el miércoles ha convocado la Conferencia Nacional del Transporte.
