Los terroristas de Cambrils y las Ramblas de Barcelona tomaron como inspiración el atentado de 2015 a la sala Bataclán, en París, y fijaron como posibles objetivos discotecas y festivales de Barcelona y Benicàssim, entre ellos el Rototom, por ser ejemplo del modo de vida occidental que distrae a los musulmanes de sus «verdaderas preocupaciones». Lo evidencian las numerosas búsquedas que realizaron por Internet de varios locales de ocio y festivales y que los Mossos d'Esquadra recogen en un informe que obra en el sumario de los atentados del pasado 17 de agosto en Cataluña.

A través del análisis del contenido de un móvil hallado en las ruinas del chalé de Alcanar (Tarragona), donde prepararon los atentados y que previsiblemente pertenece a Mohamed Hychami -abatido en Cambrills-, los investigadores dan cuenta de las numerosas búsquedas de este tipo que los terroristas comienzan a realizar desde el 8 de agosto.

En concreto, buscaron el aforo de la discoteca Colossos (ubicada en Lloret de Mar -Barcelona-), de 1.800 personas, parecido a la sala Bataclán, objetivo del atentado del Daesh el 13 de enero de 2015 en París y que contaba con unos 1.500 asistentes, lo que lleva a pensar a los investigadores que este ataque pudo «inspirar a los terroristas a buscar objetivos del mismo calibre».

A juicio de los Mossos, dicha discoteca sería «un objetivo válido contra el que atacar» como crítica al modo de vida occidental, «que mediante la música y los espectáculos distraen a los musulmanes de sus verdaderas preocupaciones como musulmanes».

Otras discotecas famosas de Barcelona fueron objeto de búsqueda de los terroristas, como Razzmataz, Pachá y Badgad. Esta última es una sala de espectáculos pornográficos que, según el informe, supone un «ejemplo de lugar contrario a la virtud y a la moral según el ideario yihadista».

Discotecas gay de Sitges fueron sus siguientes consultas en la red, «objetivos que estarían plenamente en la línea de las directrices» del Dáesh, como evidencia el ataque a la sala Pulse en Orlando (EEUU), muy popular en la comunidad LGTB de dicha población, en junio de 2016.

El cerebro de los atentados

Agentes de la Guardia Civil y del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) se entrevistaron en prisión en cuatro ocasiones, entre 2012 y 2014, con Abdelbaki Es Satty, el imán de Ripoll (Girona) que tuvo un papel clave en la radicalización de la célula y presunto cerebro de los atentados del 17 de agosto. Levante-EMV ya informó días después de la masacre que Es Satty había sido objeto de vigilancia por parte de los servicios de inteligencia y de la Benemérita, ante el riesgo de radicalización, en la prisión de Albocàsser.

Según un informe de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, Es Satty, que cumplía condena en la prisión castellonense por un delito de tráfico de drogas, mantuvo en el centro penitenciario «cuatro entrevistas policiales»: el 5 de abril de 2012, el 24 de mayo de 2012, el 26 junio de 2012 y el 17 de marzo de 2014. Los tres primeros encuentros fueron con la Guardia y el último con el CNI.