El incendio de Llutxent deja un balance desolador. Además del incalculable valor medioambiental del paisaje destruido, decenas de casas han resultado afectadas por el fuego y hay una superficie todavía por delimitar de campos de cultivo y explotaciones agrarias devoradas por el fuego. Los ayuntamientos de Gandia, Llutxent y Pinet han solicitado al Gobierno la declaración de todo el perímetro como zona de especial emergencia para facilitar la canalización de ayudas a todos los niveles.
El delegado del Ejecutivo Central en la C. Valenciana, Juan Carlos Fulgencio, manifestó ayer que existe un «compromiso» con los damnificados y subrayó la existencia de subvenciones de Protección Civil «en atención a situaciones de emergencia o de naturaleza catastrófica» a las que se podrían acoger. Para presentar sus solicitudes y que se convoquen estas ayudas, los interesados disponen de un mes a contar desde el día de la finalización del hecho causante de la situación de emergencia.
Las diferentes líneas que se recogen son: ayudas a familias por daños personales, ayudas para paliar daños materiales en viviendas y enseres y ayudas dirigidas a corporaciones locales por gastos de emergencia.
Por su parte ,el presidente de la Diputación de Valencia, Toni Gaspar, también anunció ayer que la institución provincial coordinará, junto a la Generalitat, las ayudas para paliar los daños causados por el incendio de Llutxent.
Gaspar dijo que la prioridad es evaluar los desperfectos y restablecer las infraestructuras y los servicios dañados, para lo que mantiene «un contacto diario» con los alcaldes de los municipios, con tal de conocer de primera mano «las necesidades que habrá que resolver» y articular las líneas de auxilio económico. El presidente de la diputación resalta que «ya se empieza a trabajar el postincendio».
La Conselleria de Medio Ambiente ha anunciado, por otro lado, la creación de una mesa postincendio con las poblaciones afectadas para articular futuras intervenciones encaminadas a restaurar las zonas quemadas.
El incendio ha afectado a 4 áreas naturales y de especial protección de aves cuyo hábitat se ha visto destruido. Seo-Birdlife y Greenpeace reclamaron ayer mejoras en la planificación urbanística, dada la rapidez con la que las llamas alcanzaron las urbanizaciones de Gandia. También piden actuaciones para paliar el abandono rural, que alimenta el fuego.
