El sindicato Acaip ha cifrado en 808 los incidentes graves o muy graves registrados en la prisión valenciana de Picassent entre el 1 de enero y el 30 de junio de este año, entre ellos, nueve agresiones o intentos de agresión a funcionarios que se saldaron con lesiones de diversa gravedad y baja médica.

A través de un informe, el sindicato subrayó que la prisión valenciana es uno de los centros «más conflictivos» del sistema penitenciario español, debido a que alberga «una mezcla muy diversa de internos» y entre los que se encuentran presos de primer grado, es decir, los más peligrosos, sin que reúna «las condiciones necesarias de seguridad» para albergar a este tipo de reclusos porque «dispone de menos medidas de control y una peor estructura que otras».

Acaip, además, denunció la falta de personal y advierte de que esta reducción de funcionarios aumenta la conflictividad porque los trabajadores «no pueden llevar a cabo una adecuada vigilancia y control». En concreto, en los últimos cuatro años se ha reducido un 15 %.

Además, el informe recoge 122 casos de coacciones a trabajadores; dos intentos de desórdenes colectivos; 71 agresiones entre reclusos, incautación de 145 objetos prohibidos y 19 intoxicaciones por consumo de droga.