La Audiencia Provincial de Valencia ha vuelto a condenar a 29 años de prisión al padrastro acusado de violar a las dos hijas de su pareja cuando éstas apenas tenían seis y nueve años. El Tribunal Supremo ordenó repetir el juicio porque la defensa argumentó que partes del testimonio de las menores no se escuchaban correctamente y suponía una indefensión para su cliente. No obstante, el resultado ha vuelto a ser el mismo, imponiendo al acusado idéntica pena. Eso sí, tras someter a las pequeñas a una doble victimización después de que el ahora condenado tratara de desacreditarlas en el juicio.

El condenado, que ya ha ingresado en prisión, empezó a abusar de las niñas en septiembre de 2012. «Actuando con el ánimo de satisfacer su apetito sexual, cogió la mano de la niña y se la introdujo dentro del calzoncillo que llevaba puesto obligándola a realizarle una masturbación», según refleja la sentencia. Unos días después, aprovechando que se quedó a solas de nuevo con la niña, se desnudó y volvió a abusar de ella. Días más tarde, el acusado abusó sexualmente de nuevo de las dos menores, obligándolas a tener sexo bajo la amenaza de causar daño a su madre si no accedían. Además, en diversas ocasiones el acusado mostró a las dos menores vídeos de contenido pornográfico.

Asimismo, en octubre de 2012 el acusado llevó a la mayor de las dos niñas al taller de un amigo donde la violó mientras le solicitaba que gimiera como en los vídeos que le había mostrado. En ambos juicios el ahora condenado alegó que las niñas sabían mucho de sexo porque lo veían en las series de la tele.