La investigadora Consuelo Rubio-Guerri aseguró a Levante-EMV que no han trazado aún una estrategia clara de futuro por la complejidad que atañe que la nueva variante del virus solo afecte a animales aislados. «Me encantaría decir que tenemos una estrategia súperclara pero no es así. El problema que tenemos con este virus es que solo afecta a delfines aislados. Por eso solo podemos investigar y ver cómo evoluciona la enfermedad por los animales que nos van llegando, que es solo el 10% de lo que verdaderamente se muere en los océanos y esto nos limita bastante».