Un nuevo escenario se plantea sobre la política de municipios turísticos en la Comunitat Valenciana. Y es que, el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, informó el pasado lunes, en la jornada titulada «Aula turismo», organizada en Benidorm por su departamento y la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), que están ultimando un nuevo estatuto que establecerá una nueva reglamentación en estas poblaciones reconocidas como turísticas para ceñirse a los criterios de la nueva Ley de Turismo, Ocio y Hospitalidad de la Generalitat, promulgada este verano.

En todo el territorio valenciano existen 252 municipios con esta denominación, de los cuales 102 se encuentran en la provincia de València, 86 en la de Castelló y 64 en la de Alacant. Los últimos en acceder a la lista fueron Benlloch, Càlig, Crevillent, Estivella, San Jorge, Sollana y Yátova.

Estas localidades, que suponen el 46 % del total de municipios de la Comunitat Valenciana, deberán acatar una nueva serie de obligaciones y cumplir nuevos requisitos, tanto para los pueblos que quieran acceder a este grupo, como para los que ya lo están y quieren seguir beneficiándose de las líneas de financiación que, según el secretario autonómico, se podrá acceder desde «dos escenarios diferentes», las que emite la propia Agencia Valenciana de Turismo, por un lado, y el Fondo de Cooperación Municipal según «la singularidad o necesidades especiales de estos municipios», informó.

En palabras del propio Colomer, con el nuevo estatuto «no tanto premiaremos al municipio que tenía unos 'gastos extras en turismo' y que se basaban en criterios cuantitativos de alojamiento, ahora se plantea una nueva concepción del destino en base a elementos cualitativos».

Una estrategia que, a grandes rasgos, se basará en «practicar el código ético de turismo de la Comunitat Valenciana, estar enrolado en programas de capacitación y formación profesional» y que «obliga a los municipios a ser proactivos».

Apartamentos turísticos

En cuanto a la compatibilidad urbanística que deben expedir los ayuntamientos para registrar nuevos alojamientos turísticos, Colomer ha explicado que «las Corts aprobaron, en la nueva Ley de Turismo, Ocio y Hospitalidad, que las viviendas de uso turístico deberán contar, entre otros requisitos, con un informe municipal de compatibilidad urbanística que permita dicho uso».

«Se trata de establecer fórmulas de coordinación, que permite que tanto ayuntamientos como Generalitat compartamos información para poder registrar las nuevas viviendas turísticas y que los ayuntamientos deben ser conscientes de los espacios en su plan general que se contemplan para el alojamiento turístico», concluyó Colomer.