El presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana, Salvador Navarro, se vio ayer obligado a pedir a los partidos políticos «unidad» en torno a la financiación autonómica.

«A ver si por una vez todos los partidos son capaces de votar lo mismo en el Congreso de los Diputados y en el Senado», señaló Navarro tras la reunión de la plataforma por una financiación justa.

El rapapolvo del jefe de la patronal se producía después de un rifirrafe entre los representantes políticos de la plataforma que evidencia que, a ocho meses de elecciones, sacar la financiación de la pelea política será complicado.

La organización presentó ayer las nuevas acciones para «seguir presionando» al Gobierno central para que palie el maltrato financiero a la C. Valenciana y que, entre otras cuestiones, pasa por entablar alianzas con otras regiones como Murcia y Baleares. Participaron todos los partidos, excepto el PP, que está negado a formar parte del foro.

Ciudadanos, que hasta ahora había tenido un perfil bajo en esta plataforma, mandó esta vez a quien todo apunta será su próximo candidato a la presidencia de la Generalitat, Toni Cantó. Y el diputado, en modo campaña, aprovechó para cargar contra el PSPV al que acusó de «no estar ya tan combativo» y avisó de la amenaza del secesionismo catalán y su posible contagio a comunidades como la valenciana o Baleares.

Precisamente, a Cantó le tocaba anunciar una reunión el 19 de octubre con la plataforma gemela de Baleares para aunar sus fuerzas. Y lo hizo con recelo . «Precisamente, son los encuentros bilaterales los que nos han traído hasta aquí», dijo.

La intervención de Cantó enfadó a José Muñoz (PSPV) que evitó entrar en el cuerpo a cuerpo, aunque insistió en «gobierne quien gobierne» los socialistas seguirán reivindicando mejor financiación. Posteriormente, Cantó negó haber «reventado» el acto al asegurar que había hablado de política porque antes otros lo habían hecho.

Al margen de la refriega política, se anunciaron nuevas acciones aunque se descarta otra manifestación como la celebrada el 17 de noviembre contra Mariano Rajoy. La plataforma considera que no era necesaria otra protesta porque «el problema ya está visibilizado». El acto principal será la convocatoria de concentraciones en todos los ayuntamientos y se preven acciones en redes sociales y performances en las calles.