Si hubo un tema que condujo la marcha por el corredor cantábrico-mediterráneo fue el mal estado y la lentitud del tren que actualmente recorre las ciudades de la autonomía aragonesa y por el que los manifestantes denunciaron que se encuentran «aislados» y «marginados institucionalmente», al carecer de una adecuada comunicación entre autonomías vecinas.

De hecho, la manifestación estuvo encabezada por el «Tamagochi» (realizado por el artista fallero Luis Pascual), una parodia de cartón piedra del «tren tercermundista» (en palabras del alcalde de València Joan Ribó) que recorre las comarcas de Teruel a diario. Según denunció el presidente de la Federación de Vecinos de Teruel, Pepe Polo, la antigüedad de este tren no solo repercute en la falta de velocidad del mismo, sino también en las múltiples complicaciones a nivel técnico. Estos incidentes producen retrasos añadidos en los viajes. Y es que, según afirmó, este tren sufre más de una avería al día. Es decir, unas 400 al año. Una cifra que, tal como explicaron en la manifestación celebrada ayer en València, continua in crescendo.

Para muestra un botón: un grupo de motoristas decidió salir de madrugada de Teruel para poner rumbo a València al mismo tiempo que el tren con el objetivo de poner a prueba la lentitud del mismo y hacer más visible la denuncia por el mal estado de un tren más propio de otro siglo.

Este grupo de motoristas, que iban en Vespa, lograron su objetivo demostrando que, efectivamente, ellos habían llegado antes a València que los pasajeros que viajaban a bordo del ferrocarril que une ambas ciudades, según informaron en el Diario de Teruel.