El Consell Jurídic Consultiu ha instalado a Marina Salud a indemnizar con 21.569 euros a los cuatro hijos de una mujer de 69 años que falleció ingresada en el hospital de Dénia de un infarto agudo de miocardio días después de haber acudido al centro de salud por tener un dolor torácico donde se pautó tratamiento con analgésicos sin que se le remitiera al cardiólogo.

El CJC considera que la empresa incurrió en «una actitud negligente». La mujer era una paciente de riesgo al ser mayor de 65 años con hipertensión arterial y diabetes y estar aquejada de una grave patología cardíaca. No obstante, rebaja a la mitad la indemnización ya que paciente no siguió la indicación del servicio sanitario de volver a la consulta en caso de empeorar, señala el dictamen.