La diputada de Podemos en el Congreso Rosana Pastor no se enfrentará en las primarias autonómicas al profesor Rubén Martínez Dalmau, elegido candidato de consenso por la mayor parte de familias. Pastor, que amagó con presentarse renuncia ya que el pacto impulsado por Antonio Estañ, Pilar Lima y Beatriu Gascó para una lista de unidad en torno a Dalmau la dejaba prácticamente sin opciones. Aún así, Pastor opta a diputada con la esperanza de que las bases de Podemos la sitúen en puestos de salida pero sin formar parte de la lista unitaria.

Pastor asegura que siempre ha creído en la capacidad de Podemos para transformar la sociedad e incluso abandonó su profesión de actriz para ir al Congreso. Ahora asegura que en estos casi tres años no ha sido fácil ensamblar una columna vertebral que permitiera un crecimiento fluido a la organización, armónico sin coartar su movimiento. Y a veces se han perdido de vista las prioridades, asegura.

Pero asegura que es el momento de enderezar el rumbo y volver la mirada a las esencias de Podemos a construir un "nuevo futuro para este país de países". En ese punto añade que no sobra nadie y sostiene que la organización debe aprender a gestionar la pluralidad, explorar cómo tejer nuevos consensos que sumen y no excluyan.

Explica que en las últimas semanas se han dirigido a ella muchas personas inscritas en Podemos, compañeros y compañeras deseosas de recuperar su entusiasmo por el proyecto y añade que por eso ha decidido inscribirse para formar parte de las primarias a listas autonómicas de representación 2019.

Asegura que revalida su compromiso con la organización porque asume la tarea de recuperar la confianza de la gente a la que han perdido por el camino, aquellas que "no quieren vernos más discutiendo sobre nosotros mismos y sobre todo y fundamentalmente porque he tenido la oportunidad de comprobar la importancia de la irrupción de Podemos en el panorama político y en las instituciones".

"Es cierto que la situación política -reflexiona Pastor- ha variado, pero no es menos cierto que siguen siendo muchas, demasiadas, las personas que viven en condiciones precarias, las maltratadas por el mercado laboral o por falta de unas pensiones dignas, mucha la gente jóven que no encuentra respuesta a sus aspiraciones legítimas. Hay mucha inversión pública por recuperar, muchos derechos que se han perdido para una gran parte de la ciudadania. Podemos dijo que se parecía a la gente que lo hizo posible; y lo creo, es una herramienta en movimiento, como la sociedad, como todo lo que está vivo: se modifica, se altera, vibra y se duele, se conmueve de júbilo, se enfrenta a renuncias, aciertos y errores, como cualquiera de nosotras, como yo misma", añade.

Añade que se comprometo nuevamente porque cree que es el momento de poner punto final a inercias que no han resultado constructivas y para dar la vuelta a los sondeos que auguran una rebaja de la representación en les Corts Valencianes. "Vamos a dejar que hablen las personas inscritas y a escucharlas", añade.