La histórica gota fría que está cebándose estos días con la Comunitat Valenciana ha levantado una ola generalizada de preocupación en el sector agrario por los problemas que podrían sufrir cultivos de temporada e infraestructuras agrarias, aunque por el momento no se constatan daños considerables.

La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) ha expresado en un comunicado sus temores más fundados en los casos de los cítricos, las hortalizas y la granada, pero especialmente en el arroz. Y es que la fuerte tormenta que ha asolado de madrugada la provincia de València afectó en mayor medida a l'Albufera, "donde la siega del arroz acaba de terminar y la mayor parte de las parcelas acogen todavía la paja sin que haya sido incorporada al suelo, retirada o quemada", ha asegurado AVA-ASAJA. Advierten, por tanto, que la excesiva y prolongada humedad podría desatar un proceso de podredumbre de este residuo agrícola, lo que acabaría generando la contaminación de las aguas y, como consecuencia, una elevada mortandad de peces en el lago.

En cuanto a los cítricos, muchas explotaciones (sobre todo las situadas en zonas bajas o junto a barrancos) se encuentran inundadas y, en función de la evolución de las lluvias, podrían padecer problemas de asfixia radicular. AVA-ASAJA recomienda a los agricultores que intenten drenar con la máxima celeridad posible aquellos campos que tienen una acumulación importante de agua para tratar de evitar la aparición de hongos perjudiciales para el cultivo. Asimismo, la persistencia de las lluvias podría ocasionar daños en la piel de las variedades tempranas que ahora mismo se hallan en periodo de recolección.

No obstante, Ramón Mampel presidente de la Unió de Llauradors asegura que este año la maduración de algunos cítricos se ha retrasado, por lo que la piel de estos frutos es más fuerte y resistente a la humedad. Un factor que evitaría que sufriesen problemas de hongos.

Con todo, AVA-ASAJA asegura que, en líneas generales, el agua caída constituye una "bendición para la citricultura valenciana" puesto que contribuirá a aumentar los calibres y limpiar el arbolado, al tiempo que supondrá un ahorro de costes energéticos porque "evitará tener que hacer riegos al menos hasta el invierno". Para que esto ocurra, sin embargo, Mampel asegura que es necesario que en las próximas semanas no se repitan episodios de lluvia y se forme un ambiente seco que permita que no haya una excesiva humedad en los cultivos.

Resultados "más positivos que negativos"

Si bien es cierto que el temporal está interrumpiendo las labores de recolección de la campaña citrícola y que el cultivo del granado (más sensible al exceso hídrico) podría padecer el rajado masivo de frutos justo antes de su recogida, AVA-ASAJA destaca los beneficios que supondrá para la próxima cosecha de aceitunas de las producciones del interior de la Comunitat Valenciana, así como que "apenas tendrá repercusiones negativas sobre la uva y la almendra" cuya recolección está prácticamente finalizada. "Este episodio climático tampoco perjudica al sector ganadero, más allá de dificultar los pastos del ganado", asegura AVA-ASAJA.

Asimismo, señalan que se han producido los primeros casos de desperfectos en invernaderos, infraestructuras agrarias y caminos rurales debido a la intensidad de las lluvias y al arrastre de tierras. La organización agraria se mantendrá atenta a la evolución del temporal, ya que hay sobrados motivos para no descartar que los efectos, si bien aún resultan más positivos que negativos, pueden acabar desembocando en graves pérdidas para los agricultores valencianos.