Dicen que el saber no tiene precio, pero un comercial de una conocida editorial logró que uno de sus clientes se gastara más de 1.400.000 euros en supuestos libros.

El acusado de un delito continuado de estafa se enfrenta ahora a una pena de cinco años de cárcel ya que presuntamente se habría aprovechado de la especial vulnerabilidad del anciano, quien padece desde el 2009 una minusvalía física y sensorial del 75 por ciento, para ganarse su confianza durante años hasta incluso lograr que le legara una herencia de 600.000 euros.

Según sostiene la acusación del Ministerio Público, este comercial logró que el anciano, de 88 años, le librase 70 cheques, entre 2009 y 2014, haciéndole creer que eran para el pago de libros, por importes que oscilan entre los 7.000 y los 18.500 euros. La Sección Primera de la Audiencia Provincial de València juzga dicha estafa.

El acusado trabajó como comercial en una editorial entre los años 2000 y 2004 y tuvo como cliente al anciano, quien compraba gran cantidad de libros que abonaba por domiciliación bancaria. A partir de 2004, y durante los diez años posteriores el procesado fue estrechando su relación con él, visitándole casi todos los días en su domicilio.

El estado de salud del anciano fue deteriorándose, según detalla el fiscal, debido a un glaucoma crónico, un accidente vascular y varias dolencias cardíacas, que le hicieron beneficiario, en 2009, de un reconocimiento de minusvalía del 75 % por parte de la Generalitat Valenciana.

Tal era la confianza depositada por el cliente en este comercial que en 2008 firmó una declaración jurada en la que le legaba 600.000 euros.