La digestión del tsunami de programas de actuación integrada (PAI) presentados durante la pasada década prodigiosa del urbanismo valenciano ha provocado la presentación de otro tsunami de demandas que reclaman a la Generalitat, según desveló ayer la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, María José Salvador,en la conferencia del Fórum Europa. Tribuna Mediterránea celebrada en el Hotel Astoria Palace de València.

Salvador confirmó que su departamento ha evitado la clasificación de «34 millones de metros cuadrados de suelo poniendo fin a expectativas urbanísticas desmesuradas que se habían producido con anterioridad».

En contraposición, Territorio ha aprobado planes de acción territorial (PAT) como el Patricova (riesgo de inundanción), Pativel (infraestructura verde del litoral que ha protegido 7.500 hectáreas de suelo) y prevé aprobar en breve el de l'Horta, por el que se han interesado «delegaciones de profesores y alumnos de Oxford y Harvard a lo largo de 2018». La conselleria también trabaja en los PAT metropolitanos de Castelló, València, Alicante, Elx, las comarcas centrales y el Baix Segura.

Salvador hizo un repaso general a las líneas maestras del resto de actuaciones que impulsa desde su departamento, como el Programa estratégico de movilidad, infraestructuras y transportes hasta 2030, Uneix, que prevé una inversión autonómica de 6.155 millones, lo que supone una aportación anual de 512 millones, a pesar de que el presupuesto de la Conselleria de Obras Públicas suma en 2018 un total de 388,4 millones.

Preguntada al respecto, Salvador aseguró que «el programa Uneix ya se está ejecutando, porque es un programa realista muy lejos de las grandilocuencias anteriores, que ya ha permitido invertir 1.000 millones de euros esta legislatura». El desglose de esta inversión no pudo ayer ser facilitado por el departamento de Salvador.

En el turno de preguntas, la consellera fue interrogada sobre el acceso norte al Puerto de València y si estaría dispuesta a financiarlo, a pesar de que esta infraestructura ya se descartó por la Generalitat en 2012 porque su coste sobre el papel ascendía a mil millones de euros.

De hecho, Fomento también se desentendió y la Conselleria de Infraestructuras decidió asumirlo e incluirlo en el I Protocolo de Carreteras. «Tendremos que hacer una diagnosis del acceso norte al puerto y partir de un diagnóstico adecuado y ver qué tipo de conexión es la mejor. En cuanto a su financiamiento, es al Estado a quien corresponde subvencionar sus infraestructuras», toreó Salvador la respuesta.

El presidente del puerto, Aurelio Martínez, presente en el acto, respondió a preguntas de los periodistas al finalizar el acto que el nuevo acceso al puerto es necesario «porque por algún sitio tendrán que entrar los 10.000 camiones que cada día acceden al recinto portuario» que ya colapsan el baipás «que sigue sin ampliarse». «Es una infraestructura necesaria que no hace daño a nadie», defendió.