La futura ley de Gobierno abierto de la Comunitat Valenciana establecerá por primera vez la obligación de que el Consell apruebe, durante los seis primeros meses de mandato, un Plan de Gobierno, con sus líneas de actuación y objetivos más destacados, del que se hará un seguimiento semestral.
El anteproyecto de ley, que ha aprobado el pleno del Consell este viernes, lo ha presentado el conseller de Transparencia, Manuel Alcaraz, quien ha destacado que es una norma "importante, compleja y larga", con un centenar de artículos, e incluye novedades como una nueva configuración del Consejo de Transparencia.
El conseller ha destacado que esta norma eleva a rango de ley el Código de buen Gobierno del Consell y extiende a los ayuntamientos y resto de entidades públicas la obligación de contar con un código de estas características, mientras que prevé la inclusión de principios éticos en los pliegos de contratos públicos y las convocatorias de subvenciones.
Alcaraz ha recordado que esta ley es un compromiso del Pacto del Botánico, ya que la ley de Transparencia vigente se aprobó en el último pleno del anterior Consell y era necesario mejorarla y avanzar en el concepto de gobierno abierto, la dación de cuentas y la participación, algo "capital" para mejorar la democracia.
