El president de la Generalitat, Ximo Puig, cerró el acto de inauguración del 46 congreso estatal de CECE destacando que la educación «es la palanca del progreso de la sociedad». El jefe del Consell mostró su respaldo a la enseñanza concertada al insistir en que la escuela «debe respetar y garantizar la pluralidad de la sociedad». «Las distintas maneras de prestar el servicio educativo son necesarias y deben ser complementarias», añadió.
Puig defendió una educación «igualitaria e integradora» y apeló a tender puentes con la patronal de la concertada, muy crítica con las políticas educativas del Consell del Botànic. «Con su contribución y ayuda mejoraremos la educación, desde posturas diferentes pero con la necesidad de buscar convergencias y acuerdos», insistió. «Acordar y pactar no es traicionar, es simplemente ser inteligentes», concluyó.
La Federación de Centros de Enseñanza de València (Feceval), la patronal de la Comunitat adherida a CECE, es la organizadora de este congreso estatal que no acogía la ciudad de València desde 2000. El presidente de Feceval, Alberto Villanueva, explicó que el lema de este cónclave -Necesarios, plurales y complementarios- recoge los tres pilares de la enseñanza privada y concertada «que se han cuestionado en los últimos años». Para Villanueva «la libertad de elección de las familias es incuestionable y la demanda social nos avala».
«Contrarreforma educativa»
En su opinión, los cambios que quiere introducir el Ejecutivo en la Lomce son «una contrarreforma contra la libertad de los padres a la hora de elegir la enseñanza que quieren para sus hijos». Por ello, instó al Gobierno y a las autonomías a «respetar la demanda social, cerrando un gran acuerdo positivo para todos que nos permita centrarnos en temas claves como la innovación, la calidad educativa y la lucha contra el fracaso escolar».
