El president de la Generalitat Valenciana y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, instó ayer a «luchar hasta el final» para aprobar los presupuestos generales del Estado y «que llegue el diez por ciento de las inversiones regionalizables para la Comunitat Valenciana a las que se comprometió» el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras la reunión que mantuvieron a principios de octubre.
Así lo manifestó Puig ayer al ser preguntado sobre las declaraciones que realizó Sánchez durante su estancia en Guatemala, donde apuntó que la aprobación de los presupuestos es «accesoria» y que «apostará por decretos leyes si no hay acuerdo parlamentario».
«Efectivamente, si no hay presupuestos nos afectará», reconoció Puig, quien añadió que «hay cuestiones que sí que se pueden resolver a través de decretos ley, pero lo razonable es que haya presupuestos en España». «Hay que luchar hasta el final para intentar conseguir el acuerdo de las fuerzas políticas para sacar los presupuestos», agregó.
Las cuentas más ambiciosas
Asimismo, apuntó que «aquellos que no quieran apoyar los presupuestos que van a mejorar la vida de los españoles sustancialmente tendrán que explicar por qué están frenando el progreso de la Comunitat Valenciana».
Ximo Puig también se refirió a los presupuestos de la Generalitat de 2019, a los que definió como «los más ambiciosos de la legislatura» y que «hablan sobre todo del gran objetivo del país: la ocupación».
El jefe del Consell apuntó que serán unos presupuestos centrados en la creación de empleo, la igualdad de recursos para el gasto social y unos presupuestos que den «garantía de igualdad de oportunidades».
«Estos presupuestos ejemplifican la legislatura que acabará en unos meses y la que empezará de nuevo», apuntó Puig, quien añadió que «la Comunitat Valenciana se ha normalizado y además, lidera el crecimiento económico y las políticas sociales». «En tres años -añadió- se han creado 200.000 puestos de trabajo» y «esto lo ha hecho la sociedad civil, desde las empresas hasta los propios trabajadores, pero el Gobierno ha puesto el escenario de estabilidad que debe ser el elemento fundamental».
Puig destacó que durante estos cuatro años la Comunitat Valenciana ha sido «un ejemplo de estabilidad, diálogo y honradez. Hemos pasado del paradigma de la corrupción al de la solidaridad».
