Unos 1.000 exámenes suspendidos cada día. Esa es la estimación de las pruebas que se suspenderán a diario en la Comunitat Valenciana, según la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F), como consecuencia de una huelga que ha regresado hoy por incumplimiento de los acuerdos adoptados.

Los examinadores de tráfico pusieron fin hace un año (el 13 de diciembre de 2017) a una huelga de 6 meses que acarreó graves perjuicios a quienes optaban a examinarse del carné de conducir. Los acuerdos constan en el papel pero no en las nóminas de los trabajadores y la huelga ha regresado hoy con la suspensión de unos 1.000 exámenes (la cifra definitiva se sabrá al final del día aunque ya se sabe que el 90% de los trabajadores han secundado los paros) y podría suponer la suspensión de 20.000 pruebas ya que la huelga se prevé desde hoy y hasta el 21 de diciembre.

Los examinadores pusieron fin a los paros hace un año tras un acuerdo alcanzado en el Congreso, firmado por todos los grupos parlamentarios a excepción del PP, que introducía una partida presupuestaria para poner fin a una "discriminación salarial" que el colectivo soportaba desde hacía diez años con un compromiso que se quedaba en agua de borrajas.

El acuerdo se materializaba en la Ley de Presupuestos Generales del Estado de 3 de julio, cuando se aprobó por unanimidad el incremento retributivo del complemento específico del colectivo examinador, así como el de los funcionarios de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.

Sin embargo, a fecha de hoy, según Asextra (Asociación de Examinadores de Tráfico), aún no se ha ejecutado (ni tan siquiera aprobado) el incremento retributivo del complemento específico al colectivo examinador por parte de la Comisión Interministerial de Retribuciones (CECIR). El sindicato CSI·F explica que la partida que prevé ese pago ha de ejecutarse antes de que concluya el año para que surta efecto. Ante una nómina que no refleja incremento alguno, el colectivo de examinadores ha convocado una huelga general que ha empezado hoy con la suspensión de 1.000 pruebas en la Comunitat Valenciana y una previsión de 80.000 en toda España.