El Defensor del Pueblo en funciones, Francisco Fernández Marugán, ha destacado que la Declaración Universal de Derechos Humanos "no viene del cielo", sino que es consecuencia del trabajo de los hombres y mujeres, y ha considerado necesario "ponerse las pilas" para defenderlos.
Antes de intervenir en el congreso internacional 70 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que organiza la Universitat de València, Fernández Marugán ha considerado "preocupante" la emergencia en toda Europa de gente "poco respetuosa con la libertad y la equidad".
Tras recordar que la primera mitad del siglo XX fue "muy cruel" y "dolorosa", con dos guerras mundiales y multitud de guerras locales y regionales, entre ellas la Guerra Civil española, ha advertido: "no estamos curados de esas enfermedades" que afectaron a toda Europa hace casi un siglo.
Ha destacado que la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 fue posible porque hubo "medio siglo horroroso" en el que "mucha gente luchó por la libertad y la justicia y se fueron produciendo pequeños avances".
"Las cosas no vienen del cielo, las cosas vienen como consecuencia del trabajo de los hombres y mujeres", ha afirmado Fernández Marugán, quien se ha dirigido a un auditorio de universitarios que han asistido a escuchar su conferencia.
Para Fernández Marugán, "hay que trabajar políticamente y defender un conjunto de valores", como son "garantizar la democracia, pero también unas dosis cada vez más crecientes de igualdad".
Ha agregado que ese "equilibrio entre la libertad política y la intervención para hacer una sociedad justa lo tienen que poner los poderes públicos en funcionamiento" y en esa tarea, ha asegurado, "los defensores del pueblo tienen una tarea a realizar".
El Defensor del Pueblo en funciones ha afirmado que la crisis económica ha traído a la sociedad española "una dosis importante de desigualdad", algo que ha puesto de manifiesto que "hay una serie de políticas públicas que son insuficientes".
En España, ha asegurado, "se gasta menos de lo que se debería gastar en educación, sanidad, servicios sociales y vivienda", lo que provoca una serie de carencias que, en su opinión, los poderes públicos, tanto autonómicos, como locales y central, "deberían ser capaces de corregir".
"Si queremos que se corrija la desigualdad creciente de esta sociedad, tendremos que gastar más en aquellas políticas que favorecen más a los ciudadanos, especialmente a los ciudadanos vulnerables", ha manifestado.
Fernández Marugán ha lamentado que los informes que presenta el Defensor del Pueblo reciban más atención en el momento de su presentación ante las Cortes Generales que en el debate parlamentario. "No hemos llegado a ese momento donde el Parlamento se siente, reflexione y diga: esto hay que corregirlo porque lo recomienda así el Defensor del Pueblo", ha subrayado, algo que considera una lástima, pues cree que los partidos "tienen un bagaje suficiente para corregir muchos de los fallos" que esta institución constata.
