La Conselleria de Sanidad ha cedido finalmente y ha elevado hasta un 150 % el pago inicial que iban a hacer por algunas cirugías en un intento de que los profesionales vuelvan a adherirse al conocido como plan de autoconcierto, y los quirófanos de la sanidad pública se vuelvan a abrir por las tardes para reducir las abultadas listas de espera sin tener que derivar pacientes a la privada. Después de dos meses de parón en el programa -por el plante protagonizado por los traumatólogos, anestesistas, urólogos y cirujanos por las bajas compensaciones previstas-, Sanidad presentó ayer ante la mesa sectorial un nuevo plan que debe entrar en vigor en 2019 y que mejora cuantitativa y cualitativamente la primera propuesta de noviembre que supuso el inicio de los parones.
El futuro decreto recoge las peticiones lanzadas por los sindicatos hace solo una semana en mesa técnica y, por ello, todos los sindicatos lo apoyaron, a excepción de Satse que se abstuvo por considerarlo un parche cuando se trata de un problema estructural. Según el borrador al que ha tenido acceso Levante-EMV, hay intervenciones que, con respecto al decreto que está en vigor desde noviembre, se pagarán un 150 % más caras como las operaciones sobre el lagrimal o dacriocistorinostomía, según la nueva codificación: de los 40 euros iniciales para cada facultativo a los 100,2 del nuevo acuerdo. Otras intervenciones habituales y en lista de espera también serán mejor remuneradas como la retirada de las amígdalas (de 40 a 92,46 euros para los facultativos), un aumento del 132 %; la intervención de hernia discal, que mejora en un 111 % o el 46 % de mejora en la compensación por hacer las artroscopias de hombro y rodilla.
Los especialistas, que aún deben de posicionarse sobre el nuevo programa, sí han valorado positivamente no solo el aumento de las compensaciones sino que la conselleria haya hecho un trabajo conjunto con las sociedades científicas y se haya hecho una codificación mucho más «real y exhaustiva» de las intervenciones a realizar en lista de espera.
Así, el decreto de octubre contra el que se plantaron los cirujanos preveía solo 27 agrupaciones genéricas (con un único importe) que han pasado a ser más de 100 procedimientos diferentes, codificados además de acuerdo con la clasificación internacional. Así, donde antes se hablaba de operaciones sobre la mama -con una compensación por profesional de 72 euros-, ahora se incluyen hasta cuatro intervenciones diferentes, desde ese precio hasta casi el doble. Así se han definido mejor las intervenciones en Traumatología, Cirugía y Otorrinolaringología y se han incluido procesos de cirugía cardíaca y torácica.
Esos importes aumentan, además, en un 40 % adicional si los equipos, tras mantener a raya sus propias listas de espera, operan a pacientes de otros departamentos.
Pago por sesión de 5 horas
Sanidad ha escuchado también las críticas y pese a que la intención inicial del nuevo plan de autoconcierto era empezar a pagar por intervención y no por horas en el quirófano (a razón de 309 euros por sesión de 6 horas), en el nuevo decreto permite a cada servicio optar por una forma de retribución u otra, eso sí, por un mínimo de 5 horas y una compensación de 370,76 %, una mejora del 45 %. El nuevo decreto prevé también que una comisión de seguimiento evalúe cada tres meses la efectividad del programa.
