El secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Ortiz, ha asegurado hoy que el expresidente de la Generalitat Valenciana y exministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, "recibe todos los cuidados que requiere" en el hospital en el que se encuentra custodiado. En una entrevista con Efe, Ortiz se ha referido a la situación del expresidente del PP valenciano, que lleva más de siete meses en prisión preventiva acusado de delitos de cohecho, blanqueo de capitales, malversación y prevaricación y que fue trasladado el pasado 18 de diciembre al Hospital La Fe de Valencia.

La representación legal de Zaplana ha reclamado hasta en cinco ocasiones su puesta en libertad por razones humanitarias, al padecer leucemia y haber sufrido un deterioro de su salud en la cárcel de Picassent. Ortiz recuerda a Efe que su situación está "supeditada" a las decisiones que adopte la jueza de instrucción del caso y que, en cualquier caso, la sanidad dentro de una prisión se centra básicamente en atención primaria.

"Todo lo que sean especialidades se aplican fuera de la prisión, por ese motivo está en una unidad hospitalaria donde tiene custodia y donde, por supuesto, recibe todos los cuidados que requiere", ha explicado Ortiz.

Asimismo defiende que "no hay ningún trato de excepción, ni a favor ni en contra, sobre ningún recluso", como no lo hay con el cuñado del rey Iñaki Urdangarin, encarcelado en la prisión de Brieva (Ávila) desde el 18 de junio para cumplir la condena impuesta de cinco años y diez meses de cárcel por el caso Nóos.

Ortiz ha asegurado que Urdangarin no ha solicitado ningún cambio de prisión, que está sometido al régimen ordinario y de visitas que marca la ley para todos los penados y que cuando cumpla una cuarta parte de su pena podrá, como el resto de presos, solicitar su primer permiso de salida, algo que podría estudiarse a finales de año.

Respecto a los presos preventivos del "procés" catalán, el secretario general de Prisiones ha dejado claro que tampoco recibirán trato de favor cuando sean trasladados a cárceles dependientes de la Administración central para comparecer en el juicio que tendrá lugar próximamente en el Tribunal Supremo.