La Comunitat Valenciana se ha despertado este sábado con heladas por todo el territorio, sobre todo en el interior, aunque han llegado a puntos del litoral, y con cielos despejados. Las temperaturas mínimas se mantendrán en valores similares a los del viernes, aunque sí subirán las máximas.

Las mínimas han sido especialmente bajas en el interior de la Comunitat. De hecho, los observatorios de Requena y Morella de la red de Aemet han registrado cuatro grados negativos. También bajo cero han amanecido en Ontinyent y Orihuela, con -3 y -1 respectivamente. A cero grados se han despertado en Alcoi y Elx.

En la costa, las mínimas han sido frías, aunque algo más suaves. Así, València y Castelló han registrado 2 grados, y Alicante, 3. La mínima más alta han sido los 6 grados de Vinaròs.

La mínima de Vinaròs es parecida a la máxima en Morella, que será la más baja de toda la Comunitat, ya que no superará los 7 grados. Por contra, las máximas en el litoral se situarán en el entorno de los 15 grados.

De hecho, esta será la temperatura que se espera alcanzar en Alicante, Dénia, Elx, Gandia, la Vall d'Uixó y Vinaròs, mientras que en Castelló y Orihuela tendrán 14 grados. La temperatura más alta la registrará València, con 17. El viento soplará del noroeste moderado con rachas fuertes en el interior de Castelló y en el resto, variable flojo predominando la componente oeste.

Y es que han sido las temperaturas más bajas registradas en dos años en la Comunitat Valenciana (en concreto desde el 18 de enero de 2017). Así lo asegura José Ángel Núñez, delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) de la C. Valenciana. Ayer, la localidad valenciana de Bocairent llegó a registrar hasta 13 grados bajo cero y la ciudad de València sufrió la caída del mercurio hasta los -2,6 ºC, aunque se trató de una temperatura solo presente a 15 centímetros del suelo, pues a mayor altura, la temperatura era más cálida.

Y es que la masa de aire frío que entró de madrugada en la península y produjo la brusca caída del mercurio era muy seca. Según explica Núñez, la carencia de humedad en esta masa de aire explicaría la gran diferencia de valores térmicos (más de cuatro grados en apenas un metro) al enfriar drásticamente el suelo.

La situación no es del todo extraordinaria, ya que suele ser habitual que València registre en al menos una ocasión una mínima inferior a 2 ºC. No obstante, Núñez asegura que desde los años 60 es cada vez menos frecuente.

Así, las temperaturas llegaron a caer hasta los -11 ºC en Vistabella y los -10,7 ºC en Villena. En el interior, Requena registró -10,6 ºC y los termómetros de Aiora cayeron hasta los 9,8 grados bajo cero.

Ante unas temperaturas tan acusadas, las entidades humanitarias tuvieron que ampliar la red asistencial para las personas que pernoctan en las calles de la ciudad. Cruz Roja, de hecho, movilizó a más de 40 voluntarios en la provincia de València. En horario nocturno y en coordinación con la policía y los servicios sociales, la organización humanitaria atendió a 25 personas en la ciudad de València y 10 en la localidad de Gandia. El equipo voluntario acercó entonces su ayuda al repartir mantas, ropa de abrigo y bebidas calientes a aquellas personas que, mientras las temperaturas descienden por debajo de los cero grados, no disponen de ningún sitio donde resguardarse del frío. Tres de las personas atendidas por la Policía Local decidieron acudir a un albergue municipal (las plazas de Cáritas ya llegan al tope de ocupación desde hace varios días). En total, fueron 37 las personas que fueron atendidas por la Policía Local durante las últimas horas de la tarde y hasta altas horas de la madrugada, cuando repartieron 18 mantas. Cruz Roja, además, habilitó el polideportivo municipal de Alzira (en colaboración con el Ayuntamiento) con la intención de resguardar a 10 personas en él. No obstante, aseguran que ninguna persona en la localidad decidió hacer uso del espacio.

Mientras dure el frío, Cruz Roja tendrá en alerta vehículos, recursos materiales y equipos de voluntariado de Socorros y Emergencias en Sagunt, Pobla de Vallbona, València, Mislata, Aldaia, Torrent, Horta Sud, Gandia, Oliva, l'Alcúdia, Tavernes de la Valldigna y Aiora.

Aumenta la venta de calefactores

Mientras, en los hogares valencianos la caída de las temperaturas provocaron el repunte en el consumo de energía de un 5 % con respecto al 10 de enero de 2018, según datos de la empresa energética de Iberdrola.

De hecho, en los últimos días grandes superficies como El Corte Inglés han notado un incremento en la venta de los aparatos de calefacción, concretamente de un 15 % en tan solo un día. Sobretodo en radiadores, calefactores, termoventiladores y emisores térmicos eléctricos de bajo consumo (la estufa tradicional ha sido lo menos demandado). Esto se debe a que la llegada del frío intenso ha coincidido con las rebajas, indicaron fuentes de estos grandes almacenes, lo que está animando también las ventas de ropa de abrigo en las tiendas valencianas.