El presidente Pedro Sánchez se comprometió con Puig en su visita a la Moncloa de octubre a mejorar la financiación de la dependencia, ya que el Gobierno solo asume actualmente el 12 % del coste, cuando por ley debería ser el 50 %.

En el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2019 se contempla un incremento de 515 millones de euros en la partida para transferencias en dependencia a las autonomías, un aumento que fue pactado con Podemos en octubre. En total, 1.823 millones de euros.

El Gobierno debe abonar a las autonomías el 50 % del gasto en Dependencia según prevé la ley, pero el porcentaje nunca se ha alcanzado. En 2017, la Generalitat gastó 630 millones de euros mientras que el gobierno de Rajoy solo abonó 76 millones.

De los 515 millones que se ha incrementado la partida presupuestaria, a la C. Valenciana le corresponderían 54,6 millones haciendo justicia al 10,6 % que supone la población valenciana en el Estado. Tomando de referencia los 76 millones de 2017, si se invirtieran 54,6 millones más el Estado financiaría el 20 % del gasto autonómico en materia de dependencia.

No obstante, el acuerdo de Sánchez con Podemos preveía un aumento de 32 millones, por lo que el Estado solo abonaría el 17 % del gasto y muy lejos del 50 % legal. Tras la reunión con el presidente del Gobierno, Puig aseguró que se daría por satisfecho si de cara a 2019 el Estado pasara a costear el 25 % del gasto, algo que parece aún lejano.

Solo en 2010 se alcanzó una transferencia similar a la que ahora espera el Consell. Según datos de la conselleria de Igualdad, fue bajo el gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero cuando las arcas públicas de la Generalitat recibieron una cantidad más optimista. El Gobierno transfirió el 24 % de la deuda, aunque en 2011 bajó al 21 %.