Un principio de acuerdo y negociaciones en marcha para revertir «más pronto que tarde» el área de salud de Dénia, en todo caso «antes de elecciones tal como prometió el presidente de la Generalitat.

Es el resumen que ayer hizo la consellera de Sanidad, Ana Barceló, del estado de las negociaciones entre la Administración y los gestores del área hasta 2024 la UTE Marina Salud, formada por DKV al 65 % y Ribera Salud al 35%.

Frente al hermetismo que ha imperado en este proceso de reversión «alternativa» del departamento de salud, Barceló confirmó ayer en rueda de prensa no solo que existía un principio de acuerdo para revertir el área de salud antes de elecciones sino que el proceso se haría por la vía de la adquisición de acciones y lo dio por hecho una vez estuvieran sobre la mesa las liquidaciones.

«Estamos terminando de practicar las liquidaciones de Dénia que no se habían hecho desde la puesta en marcha de la concesión. Esperamos tenerlas concluidas para finales de enero o primeros de febrero y una vez queden concluidas, cerraremos ese acuerdo con Ribera Salud y DKV», aseguró la consellera.

La socia mayoritaria, DKV, ya ha manifestado en diversas ocasiones su intención de abandonar la concesión tras las pérdidas registradas hace unos años pero Ribera Salud no estaba por la labor de perder en una misma legislatura la gestión de dos áreas tras la reversión de Alzira al concluir el contrato y no aceptarse la prórroga prevista.

Como socio minoritario, Ribera Salud podía ejercer su derecho a optar a la compra de acciones de DKV aunque la Generalitat había intentado limitar este derecho a través de la ley de sanidad en la que se da preferencia a la gestión directa y se limita al 40 % las acciones que cualquier persona o empresa puede tener «en más de un ente titular de un contrato de gestión» sanitaria en régimen de concesión.

Pese a las trabas puestas en estos meses por la firma de Alberto de Rosa a los planes de Ximo Puig sobre Dénia, ayer, fuentes de la empresa confirmaron que, efectivamente, existe un principio de acuerdo para dejar vía libre a Sanidad.

Sin embargo, el acuerdo aún no está cerrado y aún se estaba a la espera de tener más detalles de la Administración. Aunque sin confirmación estos «detalles» harían referencia al dinero que finalmente tendrá que abonar la empresa por las liquidaciones de Dénia pero también de otras áreas como Alzira. Cabe recordar que de los años pendientes de la Ribera, la consellera espera recuperar más de 100 millones, 300 en total de todas las concesiones, una cifra que parece que se rebajará tras fallar el Tribunal Supremo en contra de la forma en que el Consell del Botànic estaba cerrando las últimas liquidaciones.

Posibles contrapartidas

Ni Sanidad ni la empresa quisieron ayer confirmar, sin embargo, si la vía libre para devolver Dénia a la gestión pública antes de que acabe el contrato -además de una negociación sobre las liquidaciones- conllevará algún tipo de contrapartida como el compromiso de la conselleria de aceptar las prórrogas previstas en los contratos de los otros dos departamentos que gestiona Ribera Salud: Torrevieja y Elx-Crevillent tal como ayer apuntaba El Mundo.

Un acuerdo de este tipo tendría mal encaje legal ahora mismo teniendo en cuenta que la exconsellera Carmen Montón promovió en la legislación autonómica apostar por la gestión directa y aparcar las concesiones administrativas una vez expiraran los contratos.