El Tribunal de Enjuiciamiento de Tamaulipas (México) ha condenado a 47 años de prisión por un delito de feminicidio a Jorge Fernández González, marido de la valenciana Pilar Garrido Santamans, asesinada en el estado mexicano de Tamaulipas en el verano de 2017.
Además, la condena incluye una multa de 471.000 pesos (más de 21.600 euros) como reparación de daño entre los que se incluyen los gastos funerarios y la indemnización a la madre de la víctima. La sentencia contempla además la pérdida de la patria potestad de su hijo y sus derechos civiles y políticos ha explicado el juez relator, según el periódico mexicano Expreso.
El cómputo de la condena comienza el 29 de agosto 2017, cuando fue encarcelado Fernández. El tribunal ha convocado para mañana, miércoles, una audiencia de explicación de la sentencia.
La Fiscalía había solicitado una pena de 50 años de prisión y 1.000 días de multa para Fernández y una reparación por 471.297 pesos (más de 21.600 euros). El delito de feminicidio está tipificado con entre 40 años y 50 años de prisión. El abogado defensor ya ha anunciado que recurrirán la decisión judicial.
El fallo deja claro que Pilar Garrido, natural de Massalavés y que se trasladó a México tras casarse con Jorge, fue asesinada el 2 de julio de 2017 por su marido cuando la pareja regresaba a su casa, en compañía de su hijo, de un año entonces, desde la playa a su casa.
Semanas después, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Tamaulipas confirmó que los restos óseos localizados el 26 de julio en un paraje cercano al lugar del crimen correspondían a Pilar. La familia solicitó una segunda prueba de ADN en España, que confirmó que se trataba de ella.
Durante la investigación, la Policía mexicana trató de corroborar el testimonio facilitado por el marido, que fue interrogado en calidad de testigo cuando presentó la denuncia señalando que habían sido atacados por delincuentes comunes que se habían llevado con ellos a Pilar.
Sin embargo, las contradicciones en que incurrió y las evidencias reunidas en su contra llevaron a la policía a arrestar al marido a finales de agosto en Tamaulipas por el asesinato de su mujer.
Tras su ingreso en prisión provisional, la familia aseguró que las pruebas contra Jorge Fernández no eran «concluyentes» y la madre se desplazó hasta Tamaulipas para traer al niño.
La hermana relató en una rueda de prensa que las autoridades mexicanas no les habían dado «las suficientes pruebas que demuestren al 100 por cien que el culpable es Jorge» y agradeció a la Generalitat Valenciana que costeara la repatriación del cuerpo de Pilar.
La Fiscalía aseguró, no obstante, que contaba con las pruebas suficientes para acusar formalmente al marido de Pilar.
Finalmente, la sentencia condenatoria ha refrendado el trabajo judicial y policial, así como las evidencias científicas recogidas en contra de Jorge Fernández, que trabajaba como profesor en la academia de policía, lo que le ayudó a tener importantes conocimientos criminológicos.
