El PP ha presentado esta mañana en las Corts la misma resolución que el parlamento valenciano aprobó el 26 de octubre de 2017 para exigir al Gobierno de España que aborde ya la reforma de la financiación autonómica, un modelo que data de 2009 y que lleva cinco años caducado. Los populares han encontrado el momento idóneo, después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haya descartado la posibilidad de reformar la financiación en esta legislatura.
La iniciativa pide la reforma inmediata del sistema de financiación que establezca un nuevo modelo que cuente con recursos suficientes y que estos se repartan de forma equitativa entre todas las autonomías, lo que posibilite a los valencianos tener unos servicios públicos fundamentales dignos y poder ejercer las competencias propias. Una reforma para que nunca más existan ciudadanos discriminados solo por el hecho de pertenecer a un territorio.
Además pide el reconocimiento de los déficits de financiación acumulados directamente por el mal funcionamiento de los diferentes sistemas de financiación (deuda histórica) y establecer mecanismos de compensación para que el nuevo modelo no nazca lastrado por la justicia diferida de los anteriores
La presidenta de los populares, Isabel Bonig, ha asegurado esta mañana en la cámara que si hay un eje de la política del Botànic en estos cuatro años ha sido el de la exigencia de una mejor financiación, pero ha lamentado que el jefe del Consell, Ximo Puig, no exigiera esa reforma en su encuentro del martes con el ministro de Fomento, José Luis Ábalos. Bonig ha recordado que cuando estaba en la oposición, Sánchez aseguraba que solo faltaba valentía y liderazgo para abordar la reforma, pero ahora en el Gobierno sostiene que no puede acordarse un nuevo modelo.
El PSOE y Compromís ya han anunciado que van a firmar.
