Entre cinco y seis horas de espera en urgencias para ser atendido, puede que otras tantas en los box o en observación y, si finalmente es necesario ingresar, todavía más paciencia hasta disponer de habitación.
Es el panorama con el que el lunes por la tarde y, sobre todo, ayer se encontraron los pacientes que acudieron a los principales hospitales valencianos como el Clínico o La Fe y que ya se están viendo comprometidos con el aluvión de personas que necesitan atención hospitalaria, principalmente, por infecciones respiratorias y todo antes de la llegada de la epidemia de gripe.
Las gerencias de estos dos centros, por ejemplo, tuvieron ayer que tomar medidas «extraordinarias» ante la falta de camas y que pasan por sacrificar la «comodidad» de las habitaciones individuales de La Fe y obligar a los pacientes a compartir espacio y meter hasta a tres personas enfermas en una misma habitación en el caso del Clínico.
Ayer por la mañana, y siguiendo el plan de contingencia contra la gripe, se «doblaron» diez de las 993 habitaciones individuales de La Fe por segunda vez en la historia del hospital. El centro de Malilla se concibió como el primero con todas sus habitaciones individuales pero ya hace dos años que se tomó la decisión de prever esta duplicación de camas como «medida extraordinaria» cuando la presión asistencial en Urgencias así lo requiriera.
La situación se dio por primera vez hace ahora justo un año con la llegada de la epidemia de la gripe y ahora se ha vuelto a recurrir a esta ampliación forzosa de camas pese a que el virus todavía está en niveles de preepidemia. Para ello se aprovecha el mayor tamaño de las habitaciones para personas con diversidad funcional que hay en las plantas cuarta, quinta y séptima.
Según fuentes del hospital, los pacientes tendrán que compartir habitación «hasta que puedan ser ingresados en habitaciones individuales» o en el caso de que se ingrese a dos familiares a la vez y así se pida.
Además, la gerencia tomó ayer la decisión de reprogramar varias pruebas diagnósticas que necesitaban de ingreso para liberar espacio ya que, y según confirmaron desde el sindicato Satse, a las 8 de la mañana había 37 personas esperando cama en Urgencias y a las tres de la tarde aún había 7 pacientes por ingresar.
En el Clínico, centro con históricos problemas de espacio, las Urgencias estaban de nuevo llenas, con la sala de preingreso completa y algún paciente en espera de forma puntual en los pasillos. Ante este panorama la gerencia apostó, como en otras ocasiones por las llamadas «camas C»: poner a tres pacientes en cinco de las habitaciones del área de Neumología que son más grandes.
Refuerzos tardíos o escasos
Tal como adelantó la Conselleria de Sanidad, el lunes empezaron a llegar las personas contratadas como refuerzo para la campaña de la gripe a centros como La Fe.
Sin embargo, y según han criticado sindicatos como Satse, la ayuda es más bien «escasa»: tres enfermeros, dos auxiliares, un celador y un médico en el caso del principal hospital valenciano como «refuerzo total». En el Hospital Clínico, los contratos de refuerzo están solicitados a la administración y aprobados pero, pese a que debían haberse incorporado el 1 de enero «aún no han llegado».
