El envejecimiento de la población valenciana, debido al aumento de la esperanza de vida y a la caída de la natalidad, ha disparado la edad media por encima de los 43 años por primera vez. En 2018, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la edad media de los habitantes de la Comunitat Valenciana era de 43,05 años, 4,19 más que dos décadas antes, pues en 1998 era de 38,86 años.
No obstante, esta transición hacia la madurez fue más acusada en las dos décadas previas, cuando la edad media subió 5,26 años al pasar de los 33,6 de 1980 a los 38,86 de 1998. Es decir, que en los últimos 38 años la edad media de los valencianos ha ganado 9,45 años. La evolución en el conjunto de España ha sido similar, pues en 2018 se superan por primera vez también los 43.
Este proceso de maduración responde básicamente a la revolución de la longevidad vivida en las últimas cuatro décadas y a la caída de la natalidad, que en 2018 fue la más baja de los últimos 42 años.
El reciente macroestudio de 600 páginas «La sociedad valenciana en transformación (1975-2025)», que acaban de publicar la Universitat de València (UV) y la Institució Alfons el Magnànim de la Diputació de València, ya hace hincapié en que la tendencia al envejecimiento de la población es «irreversible».
El trabajo, obra de más de 50 investigadores sociales de la UV dirigidos por el catedrático de Sociología y vicerrector de Cultura de la UV, Antonio Ariño, y coordinados por el sociólogo Pedro García Pilán, también destaca que «sin la inmigración extranjera durante la fase expansiva de 1998 a 2008, la población valenciana se hubiera estancado».
Esto lo corrobora la serie de datos del INE, pues en esos 10 años la edad media de la población aumentó 1,64 años al paliar el envejecimiento la llegada masiva de inmigrantes extranjeros jóvenes. Sin embargo, desde 2008 hasta 2018, con el éxodo de la población extranjera en edad laboral hacia otros países la edad media de la C. Valenciana se disparó en 2,55 años.
El capítulo que esta monografía dedica a la dinámica y estructura de la población, firmado por los sociólogos Rafael Castelló y Albert Moncusí, apunta a la reducción de la proporción de jóvenes en el conjunto de la Comunitat Valenciana con un descenso acusado de las cohortes de menores de 35 años a causa de la bajada de la natalidad.
La profunda crisis de la natalidad que padeció España en la segunda mitad de los años 80 y la década de los 90 como consecuencia de la reconversión industrial que generó enormes tasas de paro, especialmente entre los jóvenes, hace que las generaciones nacidas entre 1985 y 1998, que ahora tienen entre 20 y 33 años, sean las más reducidas de las últimas cuatro décadas. Además estas cohortes escasas, con la actual crisis han sufrido una segunda merma en forma de emigración.
Los «babyboomers» llegan a los 65
Paralelamente, las cohortes del «baby boom» que forman los nacidos a partir de finales de los años 50 del pasado siglo y finales de los 60 «son las más numerosas de la historia reciente de la sociedad valenciana -según explican Castelló y Moncusí-, debido al efecto combinado de la elevada natalidad, la mayor esperanza de vida y las aportaciones de la inmigración». «Estas cohortes empiezan a llegar ya a la edad de 65 años», concluyen.
Ambos factores hacen que desde hace 20 años haya más personas mayores de 64 años que menores de 16 en la C. Valenciana. Además, insisten, «no solo hay más mayores de 64 años, sino que cada vez se viven más años una vez superado dicho umbral».
Prueba de ello es el espectacular aumento de la población valenciana de más de 80 años debido a la mayor esperanza de vida: Si en 1980 apenas el 5,7 % de valencianos mayores de 64 años estaba por encima de los 84, en 2018 esa proporción es del 14,2 %, con lo que se ha más que doblado.
