El empresario y exdirigente del Partido Popular en Galicia, Pablo Crespo, declaró ayer ante el juez José de la Mata que el verdadero amigo de Álvaro Pérez «El Bigotes» era Ricardo Costa y no Francisco Camps, como se aseguró durante los interrogatorios de la mañana, según aseguran a Levante-EMV fuentes conocedoras de su declaración. A modo de ejemplo, Crespo dio un detalle revelador a su parecer. En la extensa causa judicial de la trama Gürtel apenas hay dos grabaciones de conversaciones entre Álvaro Pérez y Francisco Camps (una de ellas la famosa en la que se llaman «amiguito del alma»). Sin embargo, son multitud las conversaciones intervenidas por la Unidad de delincuencia económica y fiscal (UDEF) de la Policía entre Pérez y Costa, vino a decir Crespo, condenado a trece años de cárcel en la pieza de la Gürtel de Fitur, y que cumple condena en la cárcel de Valdemoro desde donde fue trasladado ayer para que declarara en una de las piezas de la trama que investiga los contratos menores de las empresas de Francisco Correa con la Generalitat. La declaración de Crespo estaba prevista para mañana miércoles, aunque se adelantó a ayer.

Crespo sigue así en la línea de atacar a su antiguo compañero de aventuras empresariales en Orange Market, Álvaro Pérez, con quien la relación se ha deteriorado desde el ingreso en prisión de ambos. No obstante, Crespo sí admitió durante el interrogatorio que las facturas de Orange Market y las empresas del grupo Correa se fraccionaban «porque así lo pedía la administración» (en referencia a la Generalitat). Al igual que la peculiar (e ilegal) solicitud de prestarse a la facturación falsa que permitió al Partido Popular de la Comunitat Valenciana disparar con pólvora de rey en los actos electorales de 2007 y 2008, en los que se invirtió sin mesura. Un hecho que Crespo también admitió en el juicio por delito electoral en el que fue condenado a cinco años de cárcel más.