Podemos en la C. Valenciana asiste con expectación al desarme político en Madrid. Un partido que, aunque con filosofía federal, no puede evitar el centralismo interno en lo político y los desencuentros entre Pablo Iglesias e Iñigo Errejón repercuten en las organizaciones autonómicas.Tras la bajada de tono por parte de la organización hacia la salida de Errejón a Más Madrid, la formación valenciana cree que la dirección ha vuelto en sí y se está ejerciendo el sentido de la responsabilidad volviendo a tender puentes con Errejón.

«Hay que hablar de política y no de políticos» apuntaron ayer fuentes del partido, quienes también consideran un error mantener una postura «numantina» frente al desmarque de Errejón. Es la máxima preocupación con la que se vive en la C. Valenciana conscientes de que las disputas nacionales repercuten en el votante valenciano. El secretario general Antonio Estañ participó el viernes en un encuentro en Toledo de líderes autonómicos donde se llamó a «cooperar y no competir». Un claro dardo a los dos fundadores de Podemos y que ahora parece que quieren corregir.

El denominado pacto de Toledo. Al menos, así lo creen fuentes consultadas quien ven en esa cumbre un «paso adelante» por parte de las organizaciones autonómicas, que por un lado llamaron al diálogo y por otro comenzaron a articular sus propios discursos en la línea de reforzar el carácter federal de Podemos.

Aún así, todos mantuvieron cierta cautela. Mañana está convocado el Consejo Ciudadano Estatal, el máximo órgano del partido, para dirimir los últimos acontecimientos y movimientos políticos que han tenido el epicentro en Madrid pero que se han dejado sentir en todos los territorios. Existe cierta reserva en valorar diariamente los movimientos podemistas porque el partido «avanza y retrocede» cada día desde hace dos semanas y eso no inspira tranquilidad en el seno de las formaciones.

Aún así, el paso atrás de Iglesias también lleva a preguntarse para qué. En un sector del partido valenciano no se entiende con qué finalidad podría buscar Iglesias el pacto con Errejón: «Si la propuesta es un Unidos Podemos que confluya con Izquierda Unida y con Errejón, no tiene sentido, Errejón sigue siendo de Podemos», critican.

Defienden que la propuesta del candidato junto a Manuela Carmena en Madrid va más allá de las siglas moradas y se sitúa en la línea de Barcelona en Comú, En Marea o Adelante Andalucía, organizaciones que han superado la marca para atraer a académicos y sectores profesionales que no quieren alinearse con un partido. «Esas personas ya no se suman a Podemos», lamentan.