Los partidos del Botànic han sacado adelante esta mañana con 51 votos a favor la ley de Servicios Sociales de la Generalitat, una norma que busca blindar la atención social en los presupuestos como lo esta la Sanidad o la Educación y no pueda recortarse con los sucesivos cambios de gobierno.

PSPV, Compromís y Podemos ven cumplido así una de las iniciativa estrella del Botànic que no ha contado con el apoyo de del PP, que ha votado en contra, y de Cs que se ha abstenido. Los populares amenazaron con poner un recurso al Tribunal Constitucional y lo que sí que han confirmado es que presentarán un recurso de reposición en la mesa de las Corts contra la ley. Denuncian la rapidez en la tramitación de las enmiendas y acusa al Consell por la injerencia en la aprobación de las mismas.

La vicepresidenta Mònica Oltra, una de las impulsoras de la ley, ha criticado que el PP ha tenido “14 días para leerse 140 enmiendas”, un tiempo más que suficiente donde nadie “debería escaldarse por el trabajo”.

Oltra ha valorado la norma como la más avanzada de España y del entorno político europeo. “Se pasa del sistema asistencialista y caritativo hacia personas con dificultades a un sistema de derechos subjetivos y convierte a los servicios sociales en la cuarta pata del Estado junto a Educación, Sanidad y las pensiones”, ha declarado Oltra.

Ha arremetido contra las acusaciones del PP, quien ha comparado esta ley con la Ley de Dependencia que impulsó José Luís Rodríguez Zapatero por cargar a las cuentas municipales con el gasto. Oltra ha explicado que la financiación de esta ley se sustenta en la colaboración entre diputaciones, ayuntamientos y Generalitat, el mismo plan concertado que instauró el PP en 1997.