La cercanía de las elecciones autonómicas y municipales está detrás del plan de apoyo a los ayuntamientos, según la oposición. Tanto el PPCV como Ciudadanos criticaron ayer el anuncio del presidente Ximo Puig al que acusaron de haber entrado en un «bucle electoral». El decreto, que todavía tiene que pasar varios trámites, compromete 240 millones de euros, pero que se plasmarán en los presupuestos anuales de la Generalitat en el periodo 2019-2023, es decir, durante la próxima legislatura.

El detalle no pasó desapercibido para los populares valencianos para quienes se trata de «un brindis al sol». Fuentes del PPCV indicaron que el presidente de la Generalitat debería centrarse en los problemas que tiene ya encima de la mesa como los niños en barracones o las listas de espera y «no sacarse de la chistera» planes de inversión. «Están entrando en un bucle electoralista que huele más a etapa cerrada que a futuro», indicaron fuentes cercanas a la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, que cuestionaron que se aprueben medidas para futuras legislaturas.

Durante el acto , Puig aprovechó para hacer balance de la legislatura respecto a las inversiones dirigidas los municipios. Así, cifró en 1.218 millones de euros la inversión en los ayuntamientos esta legislatura dentro de la estrategia Juntament, que incluye actuaciones en distintas áreas como educación, agricultura o sanidad, entre otras.

Cs, además, criticó que de los 240 millones de euros anunciados en el decreto solo se destinan 500.000 euros en los presupuestos de 2019 para sanear los municipios con especial dificultad económica. El diputado Tony Woodward señaló que se trata de «otro titular vacío y únicamente electoralista», como hicieron los populares, y reclamó un plan ambicioso que sustente los 240 millones anunciados.

Además, el grupo Cs también quiso recordar que están a la espera de que el Consell confirme si se van a instalar 95 cajeros automáticos en los municipios donde se han quedado sin entidad bancaria. Por otro lado, Woodward dijo que su grupo presentó enmiendas a los presupuestos del Consell para fomentar el trabajo autónomo en municipios con riesgo de despoblación «y fueron rechazadas por el Botànic».