La investigación al expresidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, arrancó con una "hoja de ruta" sobre cómo articular un entramado societario para cobrar las presuntas mordidas pagadas por la familia Cotino al también exministro. Un legajo de papeles escritos a máquina y que se encontró un sirio en la vivienda de la Plaza de la Legión Española que ocupó Zaplana y que acabaron en manos del yonki del dinero, Marcos Benavent.
La operativa del cobro de mordidas arrancó en 2001 con la creación de Imison Internacional SA en Luxemburgo y de Inversiones Imison SL por parte de Vicente Cotino Escrivá. La "hoja de ruta" revela que en el año 2001, antes de la adjudicación del Plan Eólico, "se han mantenido conversaciones con Bancaja a través de Miguel Portolés para aportar un estudio pormenorizado de la viabilidad del negocio", según recoge este documento inédito hasta ahora cuya autoría los investigadores atribuyen a Zaplana. Se trataba de crear una maraña de empresas para que la empresa que figurara legalmente fuera Iversiones Imison SL, sin aparente relación con la familia Cotino o Zaplana. "En documento original que sirve para el cambio de propiedad de Imison Internacional SL está bajo mi custodia y la de Vicent Cotino Escrivá", señala el texto atribuido por los investigadores al expresidente de la Generalitat.
Esta "hoja de ruta" es lo que permitió a partir de noviembre de 2015 a los investigadores comenzar a tirar del hilo hasta descubrir el entramado empresarial creado por Eduardo Zaplana con la ayuda de dos de sus presuntos testaferros para cobrar hasta 10,5 millones de euros en mordidas, a través de dos empresas, según han podido acreditar los investigadores en su investigación. La familia Cotino habría obtenido beneficios empresariales por la venta de las concesiones de las inspecciones técnicas de vehículos (ITV) y del Plan Eólico Valenciano de unos 86,5 millones, según han acreditado los investigadores en el sumario sobre el que se ha levantado parcialmente el secreto.
Entre las empresas utilizadas por Zaplana para repatriar el dinero de hasta seis países distintos se encontrarían las mercantiles Turnis Sylvatica, Medlevante y Gesdesarrollos Integrales, dos de ellas administradas por el amigo de la infancia de Zaplana Joaquín Barceló Llorens.
Gesdesarrollos Integrales SL se creó el 10 de abril de 2006 en Alicante para la «promoción inmobiliaria y la construcción» y ha estado administrada por Joaquín Barceló y Maria de la Paloma Domínguez Pérez. Ésta última es administradora única de Turnis Sylvatica SL, creada en 2005 en Alicante, y dedicada a los «Servicios financieros, excepto seguros y fondos de pensiones», según el Registro Mercantil.
Por último, Medlevante SL también se creó el año 2005 en Benidorm, la ciudad de la que fue alcalde Zaplana y que le sirvió de catapulta a la política regional y nacional. Medlevante SL se dedica a «la compraventa de bienes inmobiliarios», según la declaración oficial del registro.
