La Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana ha revocado la expulsión de Carmen, la mujer boliviana de 65 años que reside en València desde hace 17 y cuya deportación fue paralizada el pasado jueves después de que sus abogados recurrieran la orden de expulsión.

Según han confirmado fuentes de la Delegación del Gobierno a este diario, la expulsión ha quedado revocada porque, a tenor del recurso presentado por sus abogados, queda reconocido el arraigo de esta mujer.

Las mismas fuentes han señalado que, en paralelo a la revocación de la expulsión, se analizará todo el procedimiento desde el principio para saber por qué no se presentó en su momento toda la documentación.

La mujer, que quedó el pasado jueves en libertad tras pasar dos días en los calabozos de la comisaría de la Policía Nacional de Paterna, iba a ser deportada ese mismo día a Bolivia porque el juzgado nº 6 de lo Contencioso-Administrativo consideraba que no tenía arraigo suficiente en València.

Carmen llegó a España hace 17 años. Desde entonces se ha dedicado a trabajar como asistenta al cuidado de niños y personas mayores, pero la mayoría de las veces sin contrato. Ésto provocó que hace dos años no pudiera renovar el permiso de residencia al no haber podido alcanzar la cotización mínima. También viven en España sus dos hijos, mientras que sus tres nietos, de 2, 4 y 6 años, nacieron en València.

El pasado mes de enero dos policías de paisano la detuvieron en el barrio de Patraix y, tras comprobar que no disponía de permiso de residencia, se inició el procedimiento de expulsión del país. El pasado martes, cuando acudía a firmar a la comisaría, la ingresaron en los calabozos y le informaron de que en 72 horas salía su vuelo para Bolivia.

La campaña por el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs NO) inició una protesta popular que culminó con la paralización del proceso por parte de la Delegación del Gobierno a raíz de un recurso presentado por la abogada de Carmen. A las 17 horas del jueves, poco tiempo antes de cuando debía salir el vuelo en el que iba a ser deportada a Bolivia, la afectada era liberada y salíd de los calabozos para poder ir a su casa.

Hoy lunes, la Delegación del Gobierno ha decidido revocar finalmente la orden de expulsión de Carmen al considerar probado su arraigo. Además, fuentes legales consultadas por este diario señalaron que no se podrá volver a incoar un procedimiento de deportación contra la mujer, ya que no hay motivos para expulsarla. Por lo tanto, definitivamente, Carmen se queda.