El «Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo» se celebra desde el 11 de marzo de 2004, cuando se instauró por decisión del Parlamento Europeo. Fue el mismo día en el que se produjo «el peor atentado de la historia de Europa» ya que el terrorismo yihadista acabó con la vida de 193 personas y dejó heridas a casi dos mil en Madrid.

A las víctimas del 11M y de cualquier tipo de terrorismo las recordaron ayer un centenar de personas reunidas en torno al monumento que las homenajea en una esquina de la calle de la Paz con la Plaza de la Reina. Estaban convocadas por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) cuyo delegado en València, Miguel Ángel Alambiaga, inició su manifiesto con «un recuerdo especial a todas las víctimas del terrorismo, especialmente a la última víctima fallecida en Burkina Faso», en referencia al misionero salesiano Antonio César Fernández, asesinado en un ataque yihadista.

Un recuerdo, explicó Alambiaga, basado en «reclamar verdad, justicia, dignidad y memoria, los cuatro pilares sobre los que se sustenta cualquier modelo» de atención a las víctimas.

Respecto a la «verdad» el delegado de la AVT reivindicó «contar el terrorismo sin tergiversaciones» además de «no admitir como agentes políticos válidos a aquellos que justifican o justificaron la violencia. Porque el derecho a la verdad ni prescribe, ni se indulta», aseguró. Al tiempo que lamentaba que aún existen «atentados» de la banda terrorista ETA que «han quedado impunes».

Además de referirse al 11M como un «caso abierto», ya que «las investigaciones están cerradas, pero sigue habiendo muchos cabos sin poder averiguar más: Hay condenados, pero no está acabado». Preguntado por los periodistas sobre qué cabos sueltos seguían existiendo en el 11M, Alambiaga no supo concretarlos.

El president de la Generalitat, Ximo Puig, presente en el acto junto a la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, aseguró en un breve parlamento que no se debe permitir «que se cambie la historia» y llamó a «aprender de la defensa de la dignidad y la memoria que realizan día a día las asociaciones de víctimas». Y lamentó que el «terrorismo etarra y el terrorismo yihadista han causado un gran dolor a muchas personas, a muchas familias, y a todos los ciudadanos de este país» por lo que llamó para «no olvidar» a las víctimas.

El candidato por Ciudadanos a la Generalitat, Toni Cantó, aseguró a los periodistas, tras el acto, estar «orgulloso de estar aquí junto al resto de casi todas las fuerzas políticas, en un día que debemos estar todos unidos junto a las víctimas y que hay que hacer memoria de todo lo que pasó», rechazó que se hagan homenajes a los terroristas y pidió que «se recuerde la historia de nuestro país».

Por último, la candidata del PP al Ayuntamiento de València, María José Català, se sumó a la petición de las víctimas: «Pedimos, como ellos piden, memoria, dignidad y justicia», además de recordar a las familias que han perdido algún ser querido. Al tiempo que coincidía en que quienes han defendido la violencia «no son interlocutores válidos. Y no debemos darles voz».