El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha pedido hoy "prudencia" a su homólogo castellano-manchego, Emiliano García-Page, en relación al trasvase Tajo-Segura y los posibles cambios que se puedan efectuar sobre el miso tras una reciente sentencia del Tribunal Supremo.

En este sentencia, el alto tribunal anula parcialmente el Plan Hidrológico del Tajo por no fijar caudales ecológicos en Aranjuez, Toledo y Talavera de la Reina. Asimismo, García-Page ha asegurado hoy martes en Bruselas que espera que la UE "vigile y obligue a la transposición de toda la normativa y el cumplimiento milimetrado en España de la normativa europea" para garantizar el caudal suficiente del Tajo.

En respuesta a estas declaraciones, y preguntado por la posibilidad de que el gobierno manchego cierre el trasvase, Puig ha considerado necesario "actuar con enorme prudencia" y de acuerdo a la ley, porque, a su juicio, "en estos momentos no hay ningún elemento que diga que el trasvase ha de cerrarse". "Inventar guerras artificiales sobre el agua es mal camino, y defenderemos los intereses de los valencianos desde la razón, no desde el enfrentamiento estéril", ha agregado.