La idea que surgió hace meses en la cabeza del Inspector Jefe de la Policía Local de Pedralba, Vicente Ortiz, al ver las enormes diferencias salariales entre las plantillas de Policía Local de los distintos municipios de la Comunitat Valenciana, y que ya adelantó Levante-EMV en el reportaje 'Policías con sueldo de alguacil', tomó ayer forma con la presentación de Unionpol, una asociación de policías locales de la Comunitat Valenciana, con carácter «independiente, apolítica y asindical», que busca la dignificación laboral y salarial de la profesión.

Vicente Ortiz, presidente de Unionpol y promotor de la idea, explica que la asociación tiene tres objetivos claros y comunes para todos los policías locales como son la dignificación salarial, para acabar con la disparidad de sueldos entre plantillas por la realización del mismo trabajo. Así como la dignificación laboral, "que los ayuntamientos sepan las cuales son las funciones reales de la Policía Local". Y por último que se considere una profesión de riesgo. "Para ello tratamos de aunar a todos los policías locales, tanto de los municipios pequeños como del resto de la Comunitat para poder hacernos fuertes y exigir esos derechos".

Así considera primordial que la Generalitat sufrague el porcentaje que se acuerde del gasto en seguridad de los ayuntamientos y que a su vez estos apuesten por invertir en sueldos dignos para sus policías para poner fin a las migraciones dentro de las plantillas por cuestiones salariales. «Los alcaldes tienen que estar con nosotros porque eso afecta a la seguridad de los ciudadanos», explica Ortiz sobre este «grave problema social» que supone que cerca del 80 por ciento de una plantilla sean policías de nuevo ingreso que no tienen conocimientos sociales del municipio ni conocen a sus vecinos.

Disparidad de salarios

La idea de crear esta asociación surgió el pasado año, tal y como adelantó este periódico. Los más de 700 policías locales asociados buscan equiparar las diferencias salariales existentes entre los agentes que desempeñan su labor en los 283 municipios de la Comunitat que cuentan con personal de seguridad propio. De hecho, aunque la media de sueldo neto mensual es de 1.600 euros (reales 1.400), hay plantillas cuyos agentes apenas llegan a los mil euros mensuales por hacer las mismas funciones que compañeros en otras localidades.

Según el estudio realizado por el agente de la Policía Local de Montesa Albert Mollá, esas diferencias económicas pueden superar los mil euros de unos municipios a otros, como ya informó en su día este periódico. En la presentación de Unionpol, celebrada ayer por la tarde en el Hotel Balneario Las Arenas de València, el autor del estudio que ha dado pie a la creación de la asociación expuso algunos de los problemas que presenta la profesión y que se ven reflejados en el Primer Estudio General de Cuerpos de Policía Local de la Comunitat Valenciana.

A la disparidad salarial ya comentada se suma la falta de dotación policial, la disparidad de horarios especiales, que no se considere todavía una profesión de riesgo, o la percepción social que tienen algunos ciudadanos como un policía de segunda "por hacer trabajos impropios que nos denigran", apuntó Mollá.

Asimismo, otro problema al que tratará de dar soluciones Unionpol son las patrullas unipersonales. Un total de 151 municipios de la Comunitat siguen manteniendo patrullas unipersonales, con el riesgo en materia de seguridad que ello conlleva tanto para los ciudadanos como para el propio agente. Sobre este último aspecto ha elaborado un estudio más en profundidad el oficial jefe de la Policía Local de Gata, Jonathan Muñoz, quien expuso que para evitar los llamados servicios unipersonales, donde el policía no cuenta con el apoyo de ningún compañero ni siquiera en caso de aviso grave, habría que contar con plantillas de al menos 16 miembros. Muchos ayuntamientos no se podrían permitir este coste, de ahí que se apunte a la mancomunidad de servicios como una posible solución.

Por su parte, Ernesto Sánchez, agente de la Policía Local de Enguera, expuso su caso como ejemplo de lo que le ocurre a muchos compañeros que se ven obligados a ir comisionados a otros municipios para tener "una nómina digna". Por hacer el mismo trabajo que realizaba en Enguera cobra más de 600 euros más al mes en localidades como Ontinyent, Chiva y actualmente Burjassot.

El origen de estas desigualdades salariales está en los complementos de destino y en una regulación todavía deficiente, que la Ley de coordinación de Policías Locales de la Comunitat Valenciana pretende corregir. El intendente Jesús Bailén, de la Policía Local de Paterna, habló sobre las dificultades de una regulación de equiparación equitativa ya que se tiene que lidiar con el principio de autonomía local, por el cual no se puede imponer una base salarial mínima. "La igualdad nunca va a ser absoluta, hay que involucrar a los políticos y a los sindicatos", apuntó Bailén.

Pero sin lugar a dudas el momento más emotivo de la tarde se vivió con el testimonio de José Ramón Quirant, policía local de Vall d'Uxó herido en el año 2000 en un tiroteo con Jaime Giménez Arbe, más conocido como «El Solitario», donde murió un compañero, Manuel Ferrandis. Quirant no pudo contener las lágrimas al recordar que en la misma calle donde se produjo el atraco en la sucursal bancaria y posterior tiroteo con el atracador se encontraba a escasos metros una guardería donde estaban sus dos hijos y otros veinte niños. Asimismo habló de la soledad del policía tras una situación como la que vivió donde se cuestionó la actuación de los propios agentes, a los que considera unos héroes ya que siguieron tras él a sabiendas del riesgo que corrían. "Que nadie se crea que eso no puede volver a pasar", advirtió sobre la necesidad del policía de estar siempre alerta y preparado ante cualquier eventualidad.

"Lo que pretende Unionpol es homogeneizar la Policía Local de la Comunitat, misma ropa, mismos salarios y mismo trabajo", destacó finalmente el presidente de la asociación. "Terminar con los diferentes intereses políticos y que nos una el único color que tenemos que es el azul", concluyó Vicente Ortiz.