De paraje colapsado ambientalmente, a todo un ejemplo de recuperación ecológica. El Parc Natural de l'Albufera, con sus filtros verdes en els «tancats» de la Pipa, Milia y l'Illa, se ha convertido en un referente mundial de «depuración» de elementos contaminantes del agua, principalmente fósforo y nitrógeno, procedentes de los abonos que se utilizan en el cultivo del arroz. Un sistema por el que hasta países como Filipinas, Sri Lanka o China se han interesado, y que se ha erigido en un modelo para exportar.

«Es un proyecto efectivo de restauración, un ejemplo positivo que pueden copiar otros», apunta Eduardo de Miguel, director de la Fundación Global Nature. Así, l'Albufera será en mayo capital mundial de los humedales, al acoger la XV Conferencia Living Lakes. Un encuentro internacional que reunirá a representantes de cuarenta países con el estado de conservación del líquido elemento y sus ecosistemas a debate.

Sergi Campillo aprovechaba ayer para poner en valor el papel de l'Albufera en la elección de València como sede y que vendrá «muy bien para reclamar una dotación hídrica para el lago». «Es una gran aliada frente a inundaciones, y se pudo ver con las lluvias del final del año pasado, donde todo el parque pudo absorber esa gran cantidad de agua», incidía el concejal de Devesa-Albufera. Campillo, además, recordaba los retos a los que se enfrenta un enclave en el que conviven tres administraciones, central, autonómica y local, gestionando la depuración de las aguas residuales, el turismo y la protección ambiental.

Bajo el lema «Un mundo sin humedales es un mundo sin agua», Living Lakes 2019 abordará en la Petxina del 7 al 9 de mayo los retos a los que se enfrentan lagos como el valenciano. «Vivimos una situación muy crítica relacionada con el agua», recalcaba la presidenta de la red Living Lakes, Marion Hammerl en videoconferencia desde el lago Constanza. «Conocemos los problemas y buena parte de cuáles serían las soluciones, por eso es urgente cambiar las palabras por la acción», según Hammerl. Una de las actividades incluirá la visita guiada al «tancat» de la Pipa, modelo de cooperación pública y privada, ONGs y universidades. «València está apostando por la sostenibilidad y l'Albufera es un eje fundamental de reconexión de la ciudad con sus espacios naturales», según Campillo.

«Un compromiso de todos»

Gloria Fayos, responsable de depuración de Aguas de Global Omnium, anfitrión de la cita y uno de los patrocinadores, enfatizaba sobre la apuesta por el medio ambiente que realizan compañías como la que preside Eugenio Calabuig. «Este es un compromiso de todos», destacaba Fayos, para recordar que Global Omnium colabora con la Fundación Global Nature en la preservación de ecosistemas ricos y fragiles como l'Albufera. «El agua de la depuradora de Pinedo se emplea de mayo a septiembre para regar los arrozales y de octubre a diciembre para mantenerla inundada», desgranaba.

De Miguel también incidía en "trabajar de la mano del sector privado" porque para el, "las empresas se tienen que comprometer en la conservación de los recursos hídricos". Alcanzado ese punto, reclamana que se hable de la "huella hídrica como una herramienta de compensación que podría servir para recuperar los humedales". "Los humedales pueden ser parte de la solución del cambio climático porque atemperan el clima y son tapones frente a inundaciones", agregaba. "Hay que reciclar el agua de muchos usos industriales, las empresas agroalimentarias consumen mucho agua. Una cervecera puede consumir entre 300.000 y 500.000m3 de agua", argumentaba.

La conferencia cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de València, y de la Generalitat Valenciana, del Ministerio para la Transición Ecológica a través de la Fundación Biodiversidad, Fundación Ursula Merz, el programa EKLIPE de la UE, y de las empresas Global Omnium, Nestlé, SEKISUI Chemical, Grupo Paradores, Karcher y SIKA.