El presidente de la Generalitat y candidato a la reelección por el PSPV quiso acercarse ayer al sufrido sector cítricola con su compromiso de impulsar un «lobby potente» que permita presionar ante las autoridades comunitarias de Bruselas y «ganar efectividad». Un anuncio que acompañó con la promesa de invertir 30 millones para un programa de reestructuración.